La oligarquía de los parásitos usureros lleva mucho tiempo preparando
el escenario para la milagrosa irrupción del celebérrimo y esperado gobierno
mundial. Guerras, epidemias, catástrofes meteorológicas, crisis económicas,
hambrunas, conflictos sociales... Se trata de generar, entre las masas
semianalfabetas de Occidente -que se cuentan por miles de millones de
personas-, la convicción de que el fin del mundo está ya próximo y Dios juzgará en breve a nuestra pecadora humanidad. Espéranse así conversiones
generalizadas y obediencia lacayuna a los designios del pueblo escogido. El mesías
judeo-cristiano aparecerá en el momento oportuno -los efectos especiales de
alta tecnología harán las veces de gloria celestial-, pero, lamentablemente,
su verdadero rostro será el de un dictador sanguinario. ¿Te vas a dejar
engañar?
Jaume Farrerons
Figueres, la Marca Hispànica, 10 de marzo de 2020.
4 comentarios:
Como muestra de este profetismo apocalíptico existe un libro publicado en 1991 y titulado "The rise of Babylon: Is Iraq at the center of the final drama?" de Charles H. Dyer, en el que se afirma que la reconstrucción del yacimiento arqueológico de la antigua Babilonia que realizaba el régimen irakí es una prueba de la cercanía del Apocalipsis. La obra contó con una traducción al idioma español ese mismo año con el título de "Babilonia renace"
https://www.iberlibro.com/9781560630821/Babilonia-Renace-Dyer-Charles-H-1560630825/plp
Por lo que he podido ver, y pese a propugnar una teoría muy excéntrica, parece que se buscó que el libro tuviera difusón, pues se tradujo también al alemán y al portugués (desconozco si a más lenguas).
Su autor es un estadounidense con una bibliografía centrada en temas religiosos, principalmente. Además ha impartido clases sobre la Bilia y organizado viajes turísticos a Israel.
https://www.goodreads.com/author/show/521180.Charles_H_Dyer
https://www.moodypublishers.com/authors/d/charles-dyer/
Como ya sabemos, Sadam Hussein resultó un agente de Lucifer poco peligroso. Pero no deja de ser muy curiosa la manera en que se asimila a los enemigos de los EEUU con representantes de los poderes infernales.
Sobre ese tema hay mucho que hablar. Existen testimonios de que Bush afirmó haber emprendido la guerra de Irak por mandato divino, es decir, orden directa de Dios (delirio). Milei es otro ejemplo de este transtorno mental. Reagan manifestó a su vez tener la sensación de entrar en los últimos tiempos, escatológicos, del apocalipsis. Todo ello cuando lo único que separa el dedo ejecutor del botón es el menguante sentido común de un loco, un rabino ultraortodoxo y fauna "bíblica" similar. El judeo-cristianismo es nuestra desgracia.
Sin querer extender mucho más el debate sobre la materia, se podría añadir que ese concepto de que los conflictos bélicos en los que los EEUU se ven en vueltos son una plasmación del antagonismo entre Dios y el Diablo (con los EEUU de parte de Dios, ni que decir tiene) es algo muy presente en la sociedad de ese país desde antiguo. Se puede encontrar, como mínimo, ya en el siglo XIX.
Una de las marchas militares más representativas de los EEUU es el Himno de batalla de la República, obra de una poetisa en tiempos de la Guerra de Secesión (1861-1865). La letra concibe el conflicto civil en términos del Apocalipsis de San Juan, como un medio que Dios tiene para castigar a los réprobos. La primera estrofa, más concretamente, se inspira de forma clara en Apocalipsis 19, 15-16.
https://es.wikipedia.org/wiki/The_Battle_Hymn_of_the_Republic
Se pueden encontrar versiones más modernas en las que se atenúa el tono de ferocidad mesiánica del original, pero en las que aún se percibe el regusto a guerra santa
https://www.youtube.com/watch?v=CFOL3MpibHg
En esta materia recomiendo la obra del antropólogo Juan Aranzadi "El escudo de Arquíloco". Hay un antes y un después cuando uno lee estos dos extensos tomos desde nuestra perspectiva ideológica (por mucho que no comparta las ideas políticas del autor, totalmente contrarias, y de raíz, a las nuestras). Gracias una vez más por su aportación.
Publicar un comentario