Imagen virtual del Tercer Templo de Jersusalén. |
Toda esta fatalidad fue posibilitada únicamente por el hecho que ya existía en el mundo una especie afín, racialmente afín, de delirio de grandeza, el delirio de grandeza judío; desde el momento en que se abrió el abismo entre judíos y judeocristianos, a estos últimos no les quedó otra opción que emplear contra los judíos los mismos procedimientos de autoconservación aconsejados por el instinto judío, mientras que los judíos habían venido empleando hasta entonces esos procedimientos sólo contra lo no-judío. El cristiano es sólo un judío de confesión "más libre".- (Nietzsche, F., El Anticristo, &44).
Para una más profunda comprensión de esta entrada, véase primero:
http://nacional-revolucionario.blogspot.com.es/2011/05/creemos-cristianos-en-nuestro-pueblo-no.html
Del cristianismo, ya lo proclamó Nietzsche, procede nuestra desgracia. Si Europa debe levantarse, habrá de saber identificar a su enemigo, y dicho enemigo no es el Islam, sino el sionismo, la extrema derecha judía enquistada en los grandes poderes económicos y financieros que irradian entorno a Wall Street sobre el entero hemisferio occidental. A éstos, los sionistas, los tenemos metidos en casa, controlando todas las palancas del poder, y no vemos a ninguno de los partidos llamados "identitarios" protestar por ello. !Hablan de poner freno a una invasión, pero ya estamos invadidos desde hace mucho tiempo, señores identitarios! Son esos oligarcas, el enemigo interno, los que promueven la inmigración, de todos los colores, para así implementar, en obediencia a la voluntad racista que les inspira, el proyecto del mestizo universal, figura alienada y sin raíces que sólo dejará intacto a un pueblo elegido como raza separada y superior al resto de la humanidad.
En efecto: si no estuviéramos invadidos, podríamos defendernos, pero observemos que el principal obstáculo con que topan los proyectos identitarios no son los inmigrantes, sino los propios gobernantes autóctonos. Deberían, los políticos identitarios, preguntarse el porqué, pero reducen la cuestión a la banalidad de un problema personal, como si esta oposición de Europa a su propio identitarismo pudiera explicarse a partir de meros conceptos políticos y encima de carácter electoralista. Resultaría, según esta versión superficial de la traición, que nuestros políticos promueven la invasión porque militan en tal o cual partido del sistema. Pero, ¿por qué contribuyen a la destrucción de su propio pueblo? ¿No pertenecen ellos mismos a ese pueblo? ¿Qué es "el sistema"? Quizá los políticos pro-inmigración están comprados y es una cuestión de dinero. Bastaría así con relevarlos de sus cargos y problema resuelto. !Vótame y los quito de en medio! No. La cuestión del colaboracionismo político oficial respecto de la invasión multiculturalista es mucho más profunda. Si nuestros políticos son colaboracionistas activos de la invasión es porque existe una tradición cultural anti-identitaria profundamente arraigada en Europa y que va mucho más allá del mero mundialismo liberal. Se trata de un tema que los políticos identitarios, procedentes de forma masiva de la extrema derecha católica, quieren ignorar, de tal suerte que no dudan en colgar en los documentos estatutarios, por ejemplo, que sus formaciones obedecen al "humanismo cristiano" o frases similares. En consecuencia, no son conscientes del alcance de lo que implica en Europa la palabra "identidad", que nos llevaría a tener que dar un salto de milenios y a una reflexión filosófica de calado abismal. Dicho brevemente, cuando los políticos identitarios apelan a su celebérrima identidad y en seguida recurren a imágenes religiosas cristianas, están convalidando los supuestos culturales del colaboracionismo: todos los hombres son iguales, hijos de Dios y tienen derecho a la felicidad, al paraíso, por lo que deben comportarse entre ellos como hermanos. Sobre este fundamento cristiano, que es la raíz y sostén cultural del mercado mundial, no hay identitarismo que valga, ni defensa posible contra la presunta "invasión". La lógica de esta fe o ideología es la política de "apertura" al "invasor" perpetrada por las autoridades oficiales. Es esa "identidad", la cristiana, pero ya secularizada, la que hace posible el colaboracionismo. Criticar éste y declararse identitario cristiano es desbarrar, no ver o no tener el coraje moral de admitir cuál es la realidad de la presunta "identidad cristiana" y de dónde deriva la debacle demográfica de Europa. La "identidad cristiana" es la negación de toda identidad, es la no-identidad que hace posible la victoria mundial de una supuesta identidad oligárquica superior promovida por la extrema derecha sionista nacionalista judía.
Los partidos identitarios se dedican en exclusiva a criticar y cuestionar la inmigración islámica en lugar de poner en evidencia los mecanismos que generan la "oleada migratoria" en general, la cual incluye a personas de religión islámica, por supuesto, pero que ante todo es un proceso cultural justificado mediante la coartada de imperativos económicos e instigado por el gran capital, la derecha judeocristiana y las élites (filo)sionistas estadounidenses. Los identitarios europeos, empero, a pesar de la evidencia del origen liberal, burgués, derechista y, por tanto, judeocristiano, de la importación de mano de obra barata multicultural, decláranse católicos y enarbolan una suerte de identidad religiosa autóctona frente a la inmigración musulmana. Olvidan que el término catolicismo (oriundo de la palabra griega katolon, universal) nombra la primera forma del universalismo y, por tanto, la antesala histórica de la globalización capitalista. Las sinagogas ya fueron, en el mundo antiguo, las playas de desembarco de la futura iglesia apostólica romana. Con tales creencias alcanzó el irracionalismo fideísta (Tertuliano: credo quia absurdum est) a una sociedad que podría haber estado madura para la verdad, pero temió enfrentarse a ella. La historia de occidente convirtióse así en el proceso de la instrumentación del concepto griego de racionalidad a manos de lo irracional, es decir, de la "esperanza", el "amor", la "felicidad" y conceptos eudemonistas análogos. Platón, siglos atrás, había preparado el terreno para la gran impostura influido por sectas órficas y pitagóricas de oriudez egipcia, pero sólo con el cristianismo adquirieron esas ideas azucaradas propias de cobardes integrales un peso social y político decisivo. El resultado fue la prostitución de la razón a manos de la religión monoteísta abrahamánica; la oposición existencial, cultural y política a que el proyecto de una comunidad de la verdad, iniciado en la Grecia democrática, heroica y trágica de Heráclito y Sófocles, culminara históricamente en forma de institución o entidad formal organizada.
Estos "cristianos patriotas" o "católicos identitarios" (una contradicción en los términos) olvidan también que los judíos llegaron el siglo pasado a Palestina como inmigrantes y terminaron expulsando a sus habitantes autóctonos, árabes musulmanes que en principio les habían acogido pacíficamente, siendo así que el islam y el judaísmo comparten, como los propios cristianos, la presunta validez de "El Libro" (el estuche de "la esperanza" dulzarrona). Los sionistas desarrollaron sus perversos planes de usurpación territorial y genocidio esgrimiendo, por todo "argumento", unos escritos bíblicos milenarios inventados a posteriori por ellos mismos, textos que les otorgan la propiedad de la tierra en nombre de Dios, algo parecido a que los "moros" reclamaran Al-Andalus apelando a su posesión histórica real (mucho más cercana en el tiempo, por cierto, que el mítico reino de David y Salomón). Si existe un ejemplo del dicho catalán, aplicado a los inmigrantes y tan utilizado en la actualidad contra los musulmanes, de fora vingueren que de casa ens tragueren ("de fuera vinieron y nos echaron de casa"), es el relato sobre los orígenes del actual Estado de Israel o de los Estados Unidos de América.
El cristianismo no es europeo, sino una religión oriental de procedencia hebrea. Este hecho está fuera de discusión y quienes farfullan sobre un Jesucristo "ario" deberían acudir urgentemente al loquero. Un nacionalista católico no puede ser nunca un verdadero patriota, porque, para el creyente, Dios siempre se encuentra, desde el punto de vista axiológico, por encima de la nación. Ahora bien, ese dios supranacional... !es el dios judío! Hay empero una nación a la que tal "dios" no pone por debajo de sí, una sola: la nación judía. La creencia judeocristiana constituye en fin, a mi entender, el primer estadio de un proceso secular, milenario incluso, conducente a la dominación sionista. Cuando todas las naciones se postren ante Dios, cuando los pueblos del mundo entero reconozcan que Dios (Yahvé) es más importante que la comunidad patria, ese dios se arrancará súbitamente la máscara y podremos contemplar el rostro de un judío racista de extrema derecha propietario del capital a escala global. Mas llegado ese momento será ya demasiado tarde para los gentiles: las naciones se esfumarán disueltas por el ácido corrosivo de la mundialización capitalista teledirigida desde Tel Aviv.
Un ejemplo significativo de lo dicho es Sabino Arana: nacionalista acérrimo, hasta el racismo, reconoce no obstante lo siguiente:
Proclamo el catolicismo para mi Patria, porque su tradición, su carácter político y civil es esencialmente católico. Si no lo fuera, lo proclamaría también; pero si mi pueblo se resistiera, renegaría de mi raza; sin Dios no queremos nada (Páginas de Sabino Arana, Madrid, Criterio, 1998, p. 33).
Las burguesías oligárquicas occidentales ya han renegado de su "raza". Lo hicieron después de la Segunda Guerra Mundial, por razones -relacionadas con el fenómeno del "fascismo"- que ahora no vienen al caso pero que ya he apuntado en otras entradas. Esta confesión de Arana permite detectar el eslabón interno, espiritual, subjetivo, del proceso de transmutación colaboracionista, que se desarrolla en el interior de la "derecha católica" antes de desplegarse en sus formas secularizadas típicamente internacionalistas e "izquierdistas".
Sabino Arana es, al mismo tiempo que cristiano, un antisemita. Y ahí reside la clave de la victoria ultraderechista judía, pues quien trabaja para la idea judeocristiana promueve con el antisemitismo la cohesión interna de la etnia hebrea, una de las finalidades, si no la finalidad por excelencia, de la impostura racista del rabinato. Considera Sabino Arana que el pueblo vasco encarna, por su aislamiento del resto de los pueblos, una suerte de pureza originaria, no obstante lo cual se postra ante un dios judío. ¿Y qué tendrán que ver los vascos con los judíos? ¿Deben los vascos adorar a un judío mientras al mismo tiempo rechazan a los judíos como pueblo y basan su identidad en un arcaísmo metafísico que no explica la procedencia exógena, o sea, no vasca, de la religión definitoria de esa misma identidad? Podemos hacer extensiva esta pregunta a todos los nacionalismos conservadores. Estamos ante la contradicción clásica e insuperada del derechista católico. Nietzsche ha sido, una vez más, el agudo analista de estas incoherencias antisemitas en tanto que consumación de las propias listezas judías:
Con ese mismo fenómeno volvemos a encontrarnos una vez más, en proporciones indeciblemente agrandadas, pero sólo como copia: -en comparación con el ‘pueblo de los santos’, la Iglesia cristiana carece de toda pretensión de originalidad. Los judíos son, justo por eso, el pueblo más fatídico de la historia universal: en su efecto posterior han falseado de tal modo la humanidad, que hoy incluso el cristiano puede tener sentimientos antijudíos, sin concebirse a sí mismo como la última consecuencia judía (Nietzsche, El Anticristo,24).
Pero quizá el testimonio de Sabino Arana no es suficiente y los católicos requieran de una evidencia más significativa que haga mención expresa del tema de la identidad. Pues bien, todos los católicos tienen que someterse ante el Papado como autoridad doctrinal suprema:
"El oficio de interpretar auténticamente la palabra de Dios, oral o escrita, ha sido encomendado sólo al Magisterio vivo de la Iglesia, el cual lo ejecuta en nombre de Jesucristo" (DV 10), es decir, a los obispos en comunión con el sucesor de Pedro, el obispo de Roma (Catecismo de la Iglesia Católica, Madrid, 1992, p. 31, &85).
Si los fieles no se someten al Magisterio de la Iglesia, dejan de iure de ser católicos, pues esta imperativa aceptación de la infalibilidad papal forma a su vez parte inalienable de la profesión de fe apostólica y romana:
Para mantener a la Iglesia en la pureza de la fe transmitida por los apóstoles, Cristo, que es la Verdad, quiso conferir a su Iglesia una participación en su propia infalibilidad. Por medio del "sentido sobrenatural de la fe", el pueblo de Dios "se une indefectiblemente a la fe", bajo la guía del Magisterio vivo de la Iglesia (cf. LG 12; DV 10). / La misión el Magisterio está ligada al carácter definitivo de la Alianza instaurada por Dios en Cristo con su Pueblo; debe protegerlo de las desviaciones y de los fallos, y garantizarle la posibilidad objetiva de profesar sin error la fe auténtica. El oficio pastoral del Magisterio está dirigido, así, a velar para que el Pueblo de Dios permanezca en la verdad que libera. Para cumplir este servicio, Cristo ha dotado a los pastores con el carisma de la infalibilidad en materia de fe y de costumbres (Op. cit., p. 212, &889-890).
Veamos, pues, qué dijo el papa Juan Pablo II respecto a la identidad judía de todo cristiano en cuanto tal. La fuente es un artículo del diario Le Monde de 2/3 de noviembre de 1997 que resume un discurso papal de 31 de octubre de 1997. La noticia fue recogida por Norberto Ceresole en su obra La falsificación de la realidad (1998):
El vespertino francés "Le Monde"... publicó un artículo sobre el reciente simposio celebrado en el Vaticano , bajo el título "Juan Pablo II avanza un paso más hacia el arrepentimiento con respecto a los judíos. (El Papa) empieza a reconocer la especificidad de la Shoah" (Holocausto).
Este proceso culminaría en 2000 con la visita del Papa a Israel y la famosa carta incrustada en el Muro de las Lamentaciones donde, de alguna manera, reconoce la versión oficial del Holocausto, sin matices. Prosigue Ceresole:
Por la trascendencia del discurso papal, se transcribe a continuación un resumen exhaustivo. "El día en que los polacos comprendan que la 'reina de Polonia' (María) es judía, habrá menos antisemitismo y un progreso en la teología cristiana". Esta "ocurrencia fuera de lugar" fue recogida en los pasillos del simposio sobre "Las raíces cristianas del antijudaísmo", por Le Monde. Ello "ilustra mejor que cualquier discurso la dificultad del examen de conciencia con que la Iglesia católica está comprometida", comenta Le Monde. Antes de elaborar el documento sobre la Shoah (holocausto) que el Papa había prometido a los judíos hace 10 años (y que debe entregar antes de que acabe el milenio), tiene que intentar convencer a su propio equipo de que el judaísmo y el cristianismo son parte de la misma historia y que el reconocimiento del pueblo judío como "pueblo elegido" por Dios forma parte de la identidad de cada cristiano. En su discurso de 31 de octubre (de 1997), el Papa Juan Pablo II invitó a sus fieles (obispos, teólogos e historiadores) a esa "revolución mental" (Ceresole, N., op. cit., Madrid, 1998, p. 383, n. 34).
!Ha dicho "identidad de cada cristiano"! Y esta identidad es la del Pueblo de Dios, ubicado, como sabemos ya por el post que precedió a este sobre el tema que nos ocupa, por encima de las Naciones, es decir, de los pueblos ontológicos, existenciales, "reales"...
Con ello vemos establecida la siguiente cadena de mando divina entre los distintos pueblos: 1º/ el Pueblo Elegido; 2º/ el Pueblo de Dios; y 3º/ el Pueblo Natural, la Patria, la Nación ontológica.
Ahora bien, si el reconocimiento del pueblo elegido como tal forma parte de "la identidad de cada cristiano" y encima los cristianos son miembros del Pueblo de Dios antes de serlo de su propio Pueblo Natural o Nación, ¿qué queda de la Patria en todo este discurso católico-universalista? ¿Qué pasa con nuestra comunidad nacional? Desde luego, para la comunidad nacional judía todo este planteamiento doctrinal constituye una auténtica victoria espiritual que anticipa futuras victorias culturales, económicas, políticas y hasta militares, contra los "gentiles"; el Pueblo Elegido puede, gracias al cristianismo, es decir, a la Roma ocupada ideológicamente por Pedro, incrustarse en la identidad de todos los pueblos como un pueblo diferenciado y superior, reducir a polvo la nación ontológica y, sin que a los no-judíos les quepa ni siquiera la posibilidad de integrarse en aquél, débenle sometimiento. Yacen así las Naciones en ese limbo que supone un Pueblo de Dios "intermedio", arrancado de su Patria originaria, pasado por la muela eclesiástica, pero subordinado al Pueblo Elegido. No hay mejor forma de describir el esqueleto teológico que fundamenta, desde el punto de vista de la irracionalidad religiosa derechista conservadora, la situación humillante de unos pueblos lanzados a la vorágine corrosiva del mercado mundial, pero, a la vez atenazados por una oligarquía transnacional que conserva, de alguna manera, su identidad nacional (hebrea) por encima del resto del género humano.
El dios cristiano no es más que la hipóstasis conceptual del nacionalismo radical judío, la proyección metafísica de una voluntad de poder mil veces frustrada frente a imperios más poderosos como Egipto, Asiria, Babilonia, Persia o Roma... La dominación universalizada de Yahvé, el catolicismo real, constituye el requisito histórico de la dominación planetaria del liberalismo secular y del internacionalismo, es decir, de la hegemonía judía sobre el resto de las naciones del mundo. Subrayemos que de ese tropiezo descomunal ni siquiera se libran los islámicos que en Palestina y Líbano luchan valientemente contra Israel, porque Alá y Yahvé son el mismo dios, el dios de Abraham, tal y como reconocen los propios creyentes musulmanes. Desde luego, si no será el dios de los Evangelios, el cristiano dios, quien nos libere del sionismo mundializador, tampoco lo será el dios del Corán. La superación del monoteísmo abrahamánico no habría que buscarla razonablemente en ninguna de sus derivaciones. Luteranos, calvinistas, católicos, ortodoxos, chiítas, judíos, sunnitas... son, todas, ramas de un mismo tronco. El camino de la libertad europea sólo puede rastrearse ya en las sendas perdidas de Grecia. Mensaje que nos envió Heidegger a todos los patriotas europeos, pero que nadie ha entendido o querido entender en el denominado campo nacional-revolucionario porque lo fácil y cómodo se ha impuesto a lo verdadero y menesteroso de esfuerzo, de auténtico heroísmo espiritual. Ahora bien, quien quiera vencer con la espada, primero deberá vencer con la idea o, en el mejor de los casos, los golpes de su tizona, sin ton ni son, derribarán puertas abiertas. En el peor, disparará a los niños de una escuela judía, la mayor estupidez y canallada que cometerse pueda en la lucha contra el sionismo.
Pero quizá el testimonio de Sabino Arana no es suficiente y los católicos requieran de una evidencia más significativa que haga mención expresa del tema de la identidad. Pues bien, todos los católicos tienen que someterse ante el Papado como autoridad doctrinal suprema:
"El oficio de interpretar auténticamente la palabra de Dios, oral o escrita, ha sido encomendado sólo al Magisterio vivo de la Iglesia, el cual lo ejecuta en nombre de Jesucristo" (DV 10), es decir, a los obispos en comunión con el sucesor de Pedro, el obispo de Roma (Catecismo de la Iglesia Católica, Madrid, 1992, p. 31, &85).
Si los fieles no se someten al Magisterio de la Iglesia, dejan de iure de ser católicos, pues esta imperativa aceptación de la infalibilidad papal forma a su vez parte inalienable de la profesión de fe apostólica y romana:
Para mantener a la Iglesia en la pureza de la fe transmitida por los apóstoles, Cristo, que es la Verdad, quiso conferir a su Iglesia una participación en su propia infalibilidad. Por medio del "sentido sobrenatural de la fe", el pueblo de Dios "se une indefectiblemente a la fe", bajo la guía del Magisterio vivo de la Iglesia (cf. LG 12; DV 10). / La misión el Magisterio está ligada al carácter definitivo de la Alianza instaurada por Dios en Cristo con su Pueblo; debe protegerlo de las desviaciones y de los fallos, y garantizarle la posibilidad objetiva de profesar sin error la fe auténtica. El oficio pastoral del Magisterio está dirigido, así, a velar para que el Pueblo de Dios permanezca en la verdad que libera. Para cumplir este servicio, Cristo ha dotado a los pastores con el carisma de la infalibilidad en materia de fe y de costumbres (Op. cit., p. 212, &889-890).
Veamos, pues, qué dijo el papa Juan Pablo II respecto a la identidad judía de todo cristiano en cuanto tal. La fuente es un artículo del diario Le Monde de 2/3 de noviembre de 1997 que resume un discurso papal de 31 de octubre de 1997. La noticia fue recogida por Norberto Ceresole en su obra La falsificación de la realidad (1998):
El vespertino francés "Le Monde"... publicó un artículo sobre el reciente simposio celebrado en el Vaticano , bajo el título "Juan Pablo II avanza un paso más hacia el arrepentimiento con respecto a los judíos. (El Papa) empieza a reconocer la especificidad de la Shoah" (Holocausto).
Este proceso culminaría en 2000 con la visita del Papa a Israel y la famosa carta incrustada en el Muro de las Lamentaciones donde, de alguna manera, reconoce la versión oficial del Holocausto, sin matices. Prosigue Ceresole:
Por la trascendencia del discurso papal, se transcribe a continuación un resumen exhaustivo. "El día en que los polacos comprendan que la 'reina de Polonia' (María) es judía, habrá menos antisemitismo y un progreso en la teología cristiana". Esta "ocurrencia fuera de lugar" fue recogida en los pasillos del simposio sobre "Las raíces cristianas del antijudaísmo", por Le Monde. Ello "ilustra mejor que cualquier discurso la dificultad del examen de conciencia con que la Iglesia católica está comprometida", comenta Le Monde. Antes de elaborar el documento sobre la Shoah (holocausto) que el Papa había prometido a los judíos hace 10 años (y que debe entregar antes de que acabe el milenio), tiene que intentar convencer a su propio equipo de que el judaísmo y el cristianismo son parte de la misma historia y que el reconocimiento del pueblo judío como "pueblo elegido" por Dios forma parte de la identidad de cada cristiano. En su discurso de 31 de octubre (de 1997), el Papa Juan Pablo II invitó a sus fieles (obispos, teólogos e historiadores) a esa "revolución mental" (Ceresole, N., op. cit., Madrid, 1998, p. 383, n. 34).
!Ha dicho "identidad de cada cristiano"! Y esta identidad es la del Pueblo de Dios, ubicado, como sabemos ya por el post que precedió a este sobre el tema que nos ocupa, por encima de las Naciones, es decir, de los pueblos ontológicos, existenciales, "reales"...
Con ello vemos establecida la siguiente cadena de mando divina entre los distintos pueblos: 1º/ el Pueblo Elegido; 2º/ el Pueblo de Dios; y 3º/ el Pueblo Natural, la Patria, la Nación ontológica.
Ahora bien, si el reconocimiento del pueblo elegido como tal forma parte de "la identidad de cada cristiano" y encima los cristianos son miembros del Pueblo de Dios antes de serlo de su propio Pueblo Natural o Nación, ¿qué queda de la Patria en todo este discurso católico-universalista? ¿Qué pasa con nuestra comunidad nacional? Desde luego, para la comunidad nacional judía todo este planteamiento doctrinal constituye una auténtica victoria espiritual que anticipa futuras victorias culturales, económicas, políticas y hasta militares, contra los "gentiles"; el Pueblo Elegido puede, gracias al cristianismo, es decir, a la Roma ocupada ideológicamente por Pedro, incrustarse en la identidad de todos los pueblos como un pueblo diferenciado y superior, reducir a polvo la nación ontológica y, sin que a los no-judíos les quepa ni siquiera la posibilidad de integrarse en aquél, débenle sometimiento. Yacen así las Naciones en ese limbo que supone un Pueblo de Dios "intermedio", arrancado de su Patria originaria, pasado por la muela eclesiástica, pero subordinado al Pueblo Elegido. No hay mejor forma de describir el esqueleto teológico que fundamenta, desde el punto de vista de la irracionalidad religiosa derechista conservadora, la situación humillante de unos pueblos lanzados a la vorágine corrosiva del mercado mundial, pero, a la vez atenazados por una oligarquía transnacional que conserva, de alguna manera, su identidad nacional (hebrea) por encima del resto del género humano.
El dios cristiano no es más que la hipóstasis conceptual del nacionalismo radical judío, la proyección metafísica de una voluntad de poder mil veces frustrada frente a imperios más poderosos como Egipto, Asiria, Babilonia, Persia o Roma... La dominación universalizada de Yahvé, el catolicismo real, constituye el requisito histórico de la dominación planetaria del liberalismo secular y del internacionalismo, es decir, de la hegemonía judía sobre el resto de las naciones del mundo. Subrayemos que de ese tropiezo descomunal ni siquiera se libran los islámicos que en Palestina y Líbano luchan valientemente contra Israel, porque Alá y Yahvé son el mismo dios, el dios de Abraham, tal y como reconocen los propios creyentes musulmanes. Desde luego, si no será el dios de los Evangelios, el cristiano dios, quien nos libere del sionismo mundializador, tampoco lo será el dios del Corán. La superación del monoteísmo abrahamánico no habría que buscarla razonablemente en ninguna de sus derivaciones. Luteranos, calvinistas, católicos, ortodoxos, chiítas, judíos, sunnitas... son, todas, ramas de un mismo tronco. El camino de la libertad europea sólo puede rastrearse ya en las sendas perdidas de Grecia. Mensaje que nos envió Heidegger a todos los patriotas europeos, pero que nadie ha entendido o querido entender en el denominado campo nacional-revolucionario porque lo fácil y cómodo se ha impuesto a lo verdadero y menesteroso de esfuerzo, de auténtico heroísmo espiritual. Ahora bien, quien quiera vencer con la espada, primero deberá vencer con la idea o, en el mejor de los casos, los golpes de su tizona, sin ton ni son, derribarán puertas abiertas. En el peor, disparará a los niños de una escuela judía, la mayor estupidez y canallada que cometerse pueda en la lucha contra el sionismo.
Resulta penoso contemplar a esos patriotas europeos que o bien se declaran cristianos, o bien nos proponen convertirnos al islam porque Hezbollah destruye eficazmente tanques Merkava. Existe una tercera versión: los "tradicionalistas" (evolianos) que apelan a la magia y al irracionalismo más ridículo y vergonzante para sentirse así, entre los cachivaches del chamán, genuinos europeos. La verdad es que casi ninguno de esos patriotas europeos puede llegar a serlo porque desconoce en absoluto lo que realmente significa la palabra "Europa". Y mientras no recuperemos el sentido básico de nuestra verdadera identidad, que nada tiene que ver con el cristianismo (y su antisemitismo), no podremos luchar contra el invasor sionista. Ignoro a qué identidad pueden apelar los árabes si renuncian al Islam (no se encuentra antes de Mahoma otra cosa que el paganismo politeísta preislámico), pero sí sé que Europa porta en su interior unos valores que no la obligan a elegir entre el obsoleto panteón de Zeus y el teodéspota de Jerusalén.
Cuando afirmo que tenemos al enemigo metido en casa y que a base de protestar por la "invasión" islámica o inmigrante no vemos que somos ya un país ocupado, no estoy utilizando una metáfora. Todos los pueblos occidentales, todas las naciones de nuestro hemisferio, excepto Israel, que sí es soberana, se han convertido países dominados por oligarquías transnacionales que trabajan al servicio de un poder extranjero. En Cataluña tenemos a la mafia catalanista, de la que ya me he ocupado y me seguiré ocupando en esta bitácora para mejor ilustrar mi postura. Esta gente "catalanista" pueden apellidarse Mas, Pujol, De Gispert o como quieran, pero no son patriotas catalanes ni en estado de coma etílico, sino sólo miembros de una oligarquía local transnacional y filosionista que labora de forma consciente y sistemática para destrucción del pueblo catalán. Existen pruebas aplastantes de ello en la mayoría de los ámbitos de actividad política. Casualmente, esos traidores son todos católicos y de derechas, burgueses de la zona alta de Barcelona, incluso cuando hablamos de las "progresistas" gentes del PSC. Cada uno de tales personajes, sin excepción, ya militen en la "izquierda", ya en el "nacionalismo conservador", han estudiado en las mismas escuelas de élite religiosas, en muchos casos jesuitas. El problema de la izquierda no es su izquierdismo, sino su naturaleza solapadamente derechista, maquillada para controlar a los sindicatos (previamente comprados) y mejor manipular así a los trabajadores. Catalanes de apellido, presuntos nacionalistas o catalanistas e incluso nauseabundos pijoprogres, los oligócratas obedecen al lobby enemigo de todas las naciones (excepto Israel); sométense gustosos, tales patrioteros de teatrillo, ante un poder universal, pero oculto a los ojos de la ciudadanía, que ellos conocen empero muy bien. Y en Cataluña esta realidad aparece mucho más marcada que, por ejemplo, en Extremadura, por motivos que ya he explicado. Ahora bien, dicha traición a la nación no es casual, ni el resultado de una "conspiración", de una decisión personal abyecta aunque puramente individual, sino un acto que brota de forma espontánea de una determinada ideología: el catolicismo, el cristianismo en general, combinado con los factores y elementos sociológicos estructurales inherentes a la burguesía capitalista (la "derecha"). Tales creencias "religiosas" en su contexto social, algo muy evidente, por ejemplo, en el calvinismo, son ya ideología transnacional antes incluso del advenimiento histórico de la oligarquía sionista, tanto como lo fueran el comunismo o el anarquismo, mera secularización (Nietzsche dixit) de la idea cristiana del "reino de Dios" en un contexto social muy diferente.
Los patriotas europeos tenemos el deber imperioso reconstruir nuestra identidad, pero semejante tarea no será nada fácil. Esa identidad no es un dato evidente, accesible a una mirada ingenua, sino algo por lo que habremos de luchar, en primer lugar contra nosotros mismos. No es por azar que los europeos hayamos sido vencidos y avancemos velozmente hacia nuestra extinción étnica y cultural. El enemigo no está metido en casa, como digo, desde hace siglos "conspirando" para la destrucción de la nación, sino que el enemigo está en nuestras propias almas toda vez que doblamos la rodilla ante un judío llamado Jesús y admitimos que ese personaje es el hijo de Dios. El día en que nuestros antepasados se postraron como creyentes bíblicos, la derrota era ya sólo cuestión de calendario, aunque hubieran de pasar siglos hasta la consumación del destino. Y hogaño parece llegada la hora. Tiempos mesiánicos: a nuestra generación le corresponderá quizá el privilegio de conocer el desenlace de un fraude milenario que comenzó en el Gólgota. La sociedad europea sabe, es consciente, hoy, de que atravesamos una situación límite, que estamos siendo agredidos por fuerzas procedentes del exterior, que hay que defender "lo de dentro" (intra), pero el aspecto más ridículo de todo el asunto es que ni siquiera sabemos cuál es nuestro enemigo, hacia qué dirección descargar los golpes o ejercer esa defensa... Algunos quieren luchar, pero... !contra el islam! !Salvemos, dicen, las tradiciones católicas! El pesebre como arma de lucha identitaria. En Wall Street deben de reírse mucho de estos patéticos "patriotas"... (Desde luego, el verdadero enemigo puede dormir tranquilo). Cuando se ignora qué es lo que hay que atacar para vencer, para salvarse en este caso, ese "qué" lo tiene todo muy a su favor. Ha triunfado ya de antemano sin tener que esperar a la batalla. Ni siquiera habrá batalla, porque sus adversarios no habrán podido reunir un triste ejército de defensa. Y nosotros, europeos, estamos en tal situación de desorientación total nada menos que con respecto al cristianismo y al crucial problema de la identidad patria.
Los guerreros de Hezbollah aciertan, sin duda, cuando destruyen un tanque Merkava del criminal ejército israelí. Pero se trata de un acierto puramente casual, siendo así que en sus propias mochilas chiítas portan inscripto el mensaje genocida de Yahvé. La destrucción de Israel no consiste en el asesinato masivo de sus habitantes (con que coincidirá, mucho me temo, la llegada del "mesías"). El enemigo son, en primer lugar, unas ideas, no unas personas. Para defenderse del Tsahal primero hay que haber confutado, más todavía, superado interior y espiritualmente, esas ideas. Cuando un loro emite el ruido "dos y dos son cuatro", acierta, dice la verdad, pero no sabe por qué dice lo que dice. Repite unos sonidos ayunos -para él- de significado. Cuando el creyente de una religión abrahamánica destruye un tanque Merkava, aunque desde el punto de vista humano y militar se trate de un acto encomiable que, repito, desde aquí saludamos con simpatía, ese luchador deja inmune el arma letal, la idea; no sólo eso, en la medida en que no es capaz de identificarla, no se identifica a sí mismo y refuerza con su desconocimiento la causa adversaria. Destruir un tanque israelí en nombre del dios de Abraham, no parece, en efecto, tener mucho sentido. Los islámicos radicales son, en todos los ámbitos de la política internacional, un juguete de la gran operación de mundialización sionista. Véase Toulouse, qué bochornosa manera de hacerle el juego a Israel. Pero no perdamos de vista la evidencia: los regímenes musulmanes más integristas, como el de Arabia Saudí, son fieles aliados de EEUU. Al Qaeda, la procedencia familiar y política misma de Bin Laden, su utilización descarada para justificar las guerras imperialistas del sionismo, deberían enseñarnos que estaremos muy lejos de poder derrotar al enemigo en el terreno material -destruir el tanque Merkava- mientras no detectemos de forma exacta y rigurosa cuál -y no quién- es el enemigo ideológico a refutar. La línea divisoria pasa por el interior de cada uno de nosotros. La victoria requiere una "revolución mental": la conversión al valor-verdad y no la violencia, el terrorismo o un nuevo genocidio.
ENSPO
La Marca Hispànica
30 de marzo de 2012
Para una más profunda comprensión de esta entrada, léase primero:
http://nacional-revolucionario.blogspot.com.es/2011/05/creemos-cristianos-en-nuestro-pueblo-no.html
Para una más profunda comprensión de esta entrada, léase primero:
http://nacional-revolucionario.blogspot.com.es/2011/05/creemos-cristianos-en-nuestro-pueblo-no.html
Fuentes adicionales sobre la reabsorción hebrea del catolicismo:
http://www.catholicsforisrael.com/he/articles/israel-and-the-church/207-salvation-is-from-the-jews
http://www.vatican.va/roman_curia/pontifical_councils/chrstuni/documents/rc_pc_chrstuni_doc_16031998_shoah_sp.html
http://www.conoze.com/doc.php?doc=1615
http://multimedios.org/docs/d000601/
http://radiocristiandad.wordpress.com/2011/03/30/juan-pablo-ii-y-benedicto-xvi-nacidos-de-vientre-judio-todo-cuadra/
El ataque cristiano a la racionalidad, verdadero filón identitario de Europa:
http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:hHZF64VgniwJ:es.scribd.com/doc/46123466/TACIANO-DISCURSO-CONTRA-LOS-GRIEGOS&hl=es&client=firefox-a&hs=tDE&gl=ar&strip=1
http://www.multimedios.org/docs/d001092/
Discurso papal del 31 de octubre de 1997:
http://www.darnna.com/phorum/read.php?19,138373
Messieurs les Cardinaux, Chers Frères dans l'Épiscopat, Chers Amis,
1. Au cours de votre symposium sur les racines de l'antijudaïsme, je suis heureux de vous accueillir. Je salue particulièrement M. le Cardinal Roger Etchegaray, président du grand Jubilé de l'An 2000, qui préside vos travaux. Je vous remercie tous d'avoir consacré ces journées à une étude théologique de grande importance. Votre colloque s'inscrit dans la préparation du grand Jubilé, pour laquelle j'ai invité les fils de l'Église à faire le bilan du millénaire écoulé, et spécialement de notre siècle, dans l'esprit d'un nécessaire "examen de conscience", au seuil de ce qui doit être un temps de conversion et de réconciliation (cf. Tertio Millenio Adveniente, n° 27-35).
L'objet de votre symposium est l'interprétation théologique correcte des rapports de l'Église du Christ avec le peuple juif, dont la déclaration conciliaire Nostra Aetate a posé les bases et sur lesquels, dans l'exercice de mon magistère, j'ai moi-même eu l'occasion d'intervenir à plusieurs reprises. En effet, dans le monde chrétien - je ne dis pas de la part de l'Église en tant que telle -, des interprétations erronées et injustes du Nouveau Testament relatives au peuple juif et à sa prétendue culpabilité ont trop longtemps circulé, engendrant des sentiments d'hostilité à l'égard de ce peuple. Ils ont contribué à assoupir bien des consciences, de sorte que, quand a déferlé sur l'Europe la vague de persécutions inspirées par un antisémitisme païen qui, dans son essence, était également antichristianisme, à côté de chrétiens qui ont tout fait pour sauver les persécutés jusqu'au péril de leur vie, la résistance spirituelle de beaucoup n'a pas été celle que l'humanité était en droit d'attendre de la part de disciples du Christ. Votre regard lucide sur le passé, en vue d'une purification de la mémoire, est particulièrement opportun pour montrer clairement que l'antisémitisme est sans justification aucune et absolument condamnable. Vos travaux complètent la réflexion menée notamment par la Commission pour les Rapports Religieux avec le judaïsme, traduite, entre autres, dans les Orientations du 1er décembre 1974 et dans les Notes pour une correcte présentation des Juifs et du Judaïsme dans la prédication et la catéchèse de l'Église catholique, du 24 juin 1985. J'apprécie le fait que la recherche de nature théologique accomplie par votre symposium entend être conduite avec une grande rigueur scientifique, dans la conviction que servir la vérité, c'est servir le Christ lui-même et son Église.
2. L'Apôtre Paul, en conclusion des chapitres de la Lettre aux Romains (ch. 9-11), dans lesquels il nous apporte des lumières décisives sur les destinées d'Israèl selon le plan de Dieu, fait retentir un chant d'adoration : "Ô abîme de la richesse, de la sagesse et de la science de Dieu!" (Rm 11, 33). Dans l'âme ardente de Paul, cet hymne est un écho au principe qu'il vient d'énoncer et qui est comme le thème central de toute l'épître : "Car Dieu a enfermé tous les hommes dans la désobéissance pour faire à tous miséricorde" (Rm 11, 32). L'histoire du salut, même lorsque ses péripéties nous semblent déroutantes, est conduite par la miséricorde de Celui qui est venu sauver ce qui était perdu. Une attitude d'adoration devant les insondables profondeurs de la Providence aimante de Dieu, permet seule d'entrevoir quelque chose de ce qui est un mystère de foi.
3. À l'origine de ce petit peuple situé entre de grands empires de religion païenne qui l'emportent sur lui par l'éclat de leur culture, il y a le fait de l'élection divine. Ce peuple est convoqué et conduit par Dieu, Créateur du Ciel et de la terre. Son existence n'est donc pas un pur fait de nature ni de culture, au sens où, par la culture, l'homme déploie les ressources de sa propre nature. Elle est un fait surnaturel. Ce peuple persévère envers et contre tout, du fait qu'il est le peuple de l'Alliance et que, malgré les infidélités des hommes, le Seigneur est fidèle à son Alliance. Ignorer cette donnée première, c'est s'engager sur la voie d'un marcionisme, contre lequel l'Église avait réagi aussitôt avec vigueur, dans la conscience de son lien vital avec l'Ancien Testament, sans lequel le Nouveau Testament lui-même est vidé de son sens. Les Écritures sont inséparables du peuple et de son histoire, laquelle conduit au Christ, Messie promis et attendu, Fils de Dieu fait homme. L'Église ne cesse de le confessrr quand, dans sa liturgie, elle reprend quotidiennement les psaumes, ainsi que les cantiques de Zacharie, de la Vierge Marie et de Siméon (cf. Ps 132, 17; Lc 1, 46-55; 1, 68-79; 2, 29-32).
C'est pourquoi ceux qui considèrent le fait que Jésus fut juif et que son milieu était le monde juif comme de simples faits culturels contingents, auxquels il serait possible de substituer une autre tradition religieuse, dont la personne du Seigneur pourrait être détachée sans qu'elle perde son identité, non seulement méconnaissent le sens de l'histoire du salut, mais plus radicalement s'en prennent à la vérité elle-même de l'Incarnation et rendent impossible une conception authentique de l'inculturation.
4. À partir de ce qui précède, nous pouvons tirer des conclusions susceptibles d'orienter l'attitude du chrétien et le travail du théologien. L'Église condamne avec fermeté toutes les formes de génocide, ainsi que les théories racistes qui les ont inspirées et qui ont prétendu les justifier. On pourrait rappeler l'encyclique de Pie XI Mit brenneder Sorge (1937) et celle de Pie XII Summi Pontificatus (1939); ce dernier rappelait la loi de la solidarité humaine et de la charité envers tout homme, à quelque peuple qu'il appartienne. Le racisme est donc une négation de l'identité la plus profonde de l'être humain, qui est une personne créée à l'image et à la ressemblance de Dieu. À la malice morale de tout génocide s'ajoute, avec la Shoah, la malice d'une haine qui s'en prend au plan salvifique de Dieu sur l'histoire. Par cette haine, l'Église se sait, elle aussi, directement visée. L'enseignement de Paul, dans la Lettre aux Romains, nous apprend quels sentiments fraternels, enracinés dans la foi, nous devons porter aux fils d'Israèl (cf. Rm 9, 4-5). L'Apôtre le souligne : "À cause de leurs pères, ils sont aimés de Dieu, dont les dons et l'appel sont irrévocables." (cf. Rm 11, 28-29).
5. Soyez assuré de ma gratitude pour les travaux que vous menez sur un thème de grande portée et qui me tient à coeur. Vous contribuez ainsi à l'approfondissement du dialogue entre les catholiques et les Juifs, dont nous nous félicitons qu'il se soit positivement renouvelé au cours des dernières décennies.
Je forme pour vos personnes et pour vos proches les meilleurs voeux et je vous accorde bien volontiers la Bénédiction apostolique.
www.sefarad.org
AVISO LEGAL
http://nacional-revolucionario.blogspot.com.es/2013/11/aviso-legal-20-xi-2013.html
Al leer esta entrada en su blog me ha venido a la mente la época en la que leí la obra de un escritor ultracatólico argentino llamado Hugo Wast (pseudónimo de Gustavo Martínez Zuviria).
ResponderEliminarEscribió una tetralogía de novelas compuesta por los títulos "El Kahal", "Juana Tabor", "666" y "Oro". En ella se narra la conspiración judía para provocar el Apocalipsis (incluso retrata al Anticristo como un individuo de estirpe judía). Pero al final, tras retratar al hebreo como el peor enemigo de la Cristiandad, también le abre el camino de la Salvación a través de la conversión (habla de rostros judíos en la "Nueva Jerusalén" en las últimas páginas de una de esas novelas).
Eso fue algo que me sorprendió, pues diversos escritores dentro del tradicionalismo católico (como Ricardo de la Cierva o Francisco Sánchez Ventura, por citar dos ejemplos patrios) han clamado que la "infiltración masónica y judaica" en la Iglesia Romana era la causa de su declive . Es decir, ¿la conversión del judío es algo deseable o no?. E aquí una contradicción interna que ni siquiera los católicos más "puritas" han conseguido evitar.
Al mismo tiempo, los derechistas neocons se fundamentan en el Libro de la Revelaciones para insistir en que los judíos son nuestros "hermanos mayores", que debemos apoyarlos militar y políticamente porque, según San Juan, el Reino de Dios sólo puede efectuarse cuando el Pueblo Elegido se convierta al credo cristiano, completando así el plan divino.
Todo esto es una mentalidad tremendamente fatalista y desoladora: el cristiano sólo puede ser salvado y destruído a través del judío, por obra y gracia de Dios. O por decirlo de otro modo, el cristiano ve en el hebreo un adversario (incluso puede ser el peor adversario de todos para su fe), pero al mismo tiempo, reconoce que lo liga a él una cadena inquebrantable.
Por eso usted acierta de lleno al afirmar que ideas como la del "Cristo Ario" que se defienden en libros como éste
http://www.libreriaeuropa.es/ficha.php?codart=RIST
no tienen ni pies ni cabeza. Si el cristiano es consecuente, fiel a los textos que considera sagrados e incontestables por ser de emanación divina, debe reconocer que siempre tendrá al judío como compañero de viaje, de un modo u otro.
Por cierto, no sé si el dicho que cita es de origen catalán o no, pero yo he escuchado a mis mayores una versión castellana del mismo: De fuera vendrá quien de casa te echará.
Veo que ha entendido perfectamente el enfoque de este artículo. Normalmente los "patriotas" son gente consevadora, de derechas, y católicos o, en los países nórdicos y anglosajones, evangélicos (reformados). Sus críticas a la decadencia de la civilización se saldan siempre con llamamientos a recuperar los valores tradicionales, pero son incapaces de darse cuenta que la crisis moral no es más que el resultado de la secularización de esos mismos valores "tradicionales". En el caso de la inmigración, el cinismo de la derecha llega a la obscenidad: traen inmigrantes para explotarlos y reventar el precio de la mano de obra, pero luego se quejan de que las iglesias están vacías y proliferan las mezquitas. En fin, el izquierdista degenerado que todos conocemos no es más que un subproducto de todos los vicios e hipocresías del hombre de derechas. Para nosotros el camino viene marcado por dos principios: 1/ un movimiento político de trabajadores, es decir, de izquierdas, que rompa con la izquierda marxista y burguesa: 2/ un movimiento que sea, además, nacional y patriótico, pero basado en la VERDAD RACIONAL, no en la religión, mucho menos la cristiana. Creemos que esta es el arma, en todos los países, para combatir la globalización y el poder de las oligarquías financieras sinpatria. Pero nadie entiende nuestro discurso, o pocos, y mucho menos, los llamados identitarios anti-inmigración, que continúan creyendo que se puede combatir el mundialismo desde el catolicismo, cuando el catolicismo es el primer escalón histórico hacia la multiculturalidad.
ResponderEliminarToca un punto muy importante cuando dice: "el cinismo de la derecha llega a la obscenidad: traen inmigrantes para explotarlos y reventar el precio de la mano de obra, pero luego se quejan de que las iglesias están vacías y proliferan las mezquitas." Esto es esencial.
ResponderEliminarEn el plano teórico, el discurso pro-inmigracionista de izquierdas y derechas insiste en conceptos tales como "todos somos personas", "todo el mundo tienen derecho a una vida mejor", "los seres humanos no son ilegales", etc. Es decir, emplea una cosmovisión nacida de lo que usted ha definido acertadamente como la secularización de los valores universalistas cristianos. Un discurso que además es completamente falso, pues el fenómeno de la inmigración no tiene como fin verdadero que el inmigrante acceda al estado del bienestar, sino que provoca su explotación y desarraigo, al tiempo que depaupera a la clase obrera autóctona.
Es decir, desde un discurso que se fundamenta (falsamente) en conseguir la felicidad del hombre, lo que se hace es esclavizarlo más aún, reducirlo a simple mano de obra barata cada vez más pobre y manejable. Además, como esa construcción ideológica nacería (también falsamente) de un profundo "amor por el género humano", quien lo contradijese se convertiría, por tanto, en enemigo del ser humano (lo que en el mundo actual sería un "fascista").
Por eso se hace especialmente patente en la intelectualidad de izquierdas esa mezcla de mentalidad burguesa e ideología marxista que usted denuncia en su comentario, caso de los miembros de la Escuela de Frankfurt y la intelectualidad francesa de mayo del 68 (y de sus equivalentes hispánicos). Todos ellos con el aval de universalismo y el amor a la Humanidad como justificante, como si de un aura de santidad se tratase.
No puedo dejar de felicitarle por esta serie de artículos en los que trata de la mafia oligárquica catalana o la mentalidad anti-fascista. Y le animo a reunirlos en un libro. Creo que sería una obra de indudable interés político y cultural.
Le agradezco sus amables elogios, que no caen en saco roto, pues los que estamos en la trinchera durante años sin otra compensación psicológica a nuestro esfuerzo que la respuesta de los lectores, recibimos el apoyo moral e intelectual de éstos como agua de mayo. Además, su respuesta, tengo que decirlo, es una de las más inteligentes que registra esta bitácora. Aquí tenemos a visitantes "de elite", debo felicitarle porque usted, en mi opinión, forma parte de ellos.
ResponderEliminarEn cuanto a la publicación de un libro, tengo ya entregado a editorial un breve ensayo sobre los indignados en el que expongo algunos de los lineamientos ideológicos esenciales de este blog. En el momento en que vea la luz, comunicaré la noticia a los seguidores de Filosofía Crítica, quienes serán los primeros en enterarse.
También, aprovechando que fui plagiado por un catedrático universitario, tengo la intención de fundar una especie de cátedra on line de filosofía a partir de este sitio, a fin de actuar como guía introductoria en el pensamiento filosófico de Martin Heidegger, manteniendo en todo momento, en la directriz pedagógica, la conexión de las cuestiones de filosofía más abstracta con los temas políticos acuciantes que aquejan a los pueblos sometidos y explotados por la oligarquía transnacional.
Gracias una vez más por su contribución y por la calidad de sus consideraciones sobre el post.
Le agradezco mucho sus palabras, pero en honor a la verdad, he de decir que la única y verdadera elite la forman los que como usted llevan años presentando batalla a cara descubierta y sin ceder ante un enemigo infinitamente más poderoso.
ResponderEliminarNo siempre coincido al 100% con lo que usted dice. Pero por la entereza que ha demostrado, así como por su talla intelectual, creo que su voz y reflexiones debieran ser -como mínimo- tenidas en cuenta por todo aquel que se considere NR.
Espero con franco interés la aparición de su libro.
Un saludo.
Sus respuestas son muy coherentes. Encontrar, actualmente, en nuestro campo, personas capaces de redactar una réplica como la suya, perfectamente razonada, redactada y documentada, no es habitual. En este sentido considero que forma parte usted de una élite de personas. Lamentablemente, en el mundo NR partimos de un nivel muy bajo. Pero incluso haciendo una comparación general,y abstracción hecha del tema NR, considero que usted tiene capacidad de razonar de forma rigurosa. Esto es siempre una excepción, váyase al "campo" ideológico que se vaya. En la actualidad, lo predomina es gente que se ha forjado unas fuertes convicciones a base de chupar de los medios de comunicación o de orientaciones personales previas, que nunca ponen en duda.
ResponderEliminarPor eso la izquierda es la otra parte del problema, en el tema de la inmigración utiliza, recurre a las típicas expresiones "progresistas", como "ningún ser humano es ilegal","Todo el mundo tiene derecho a una vida digna", lo cual tal como exponen ustedes en sus mensajes es rotundamente falso, ya que el objetivo es utilizar a esa masa humana como mano de obra muy barata, con lo cual en esas condiciones nunca podrán tener una vida diga. El siguiente objetivo de la oligarquía es que esa pobreza se socialize extendiéndola a prácticamente toda la población. El otro tentáculo del sistema es el modelo de vida en lo cultural promovido por la escuela de Frankfurt, el que estamos padeciendo actualmente,especialmente entre la población más joven, que lo único que propone es un hedonismo aburguesado.
ResponderEliminarLa izquierda, en sus distintas versiones históricas y sociológicas, liberal, socialdemócrata, marxista, anarquista..., es el resultado de la secularización de las creencias, mitos y conceptos teológicos cristianos. Secularización implica que el hedonismo de fondo inherente al cristianismo (salvación, reino de Dios), se "realiza" en el mundo de la política y de la economía. La decandencia "moral", incluso el consumo de drogas y la pederastia, expresan las radicalizaciones "carnales" de las exigencias soteriológicas y espirituales. Se pasa de un eudemonismo de la felicidad en Dios (que ya en los cristianos incluye la idea sexualoide de un conocimiento directo y carnal de Dios en la redención), al placer puro y simple proporcionado por todas las vías posibles de transgresión de la vieja sociedad cristiana. El izquierdismo es un cristianismo cocido en su propia salsa y finalmente podrido por la lógica interna que le lleva a perseguir el mito de la felicidad a base de nuevas prácticas, productos de consumo, etc. La clave del asunto es la siguiente: LA FELICIDAD NO ES UN VALOR RACIONAL. El único valor racional es, en principio, la VERDAD. Pero la verdad entra en conflicto con todos los mitos cristianos, ya sea en su forma religiosa o secularizada. La fraternidad, el amor, y constructos similares, deben leerse como derivaciones del hedonismo, no como principios éticos. Cuando estos "humanistas" tienen que exterminar a los "fascistas" (o sea, a quienes niegan la validez de sus ídolos de termitera), la fraternidad se traduce en bombas de fósforo para los civiles del bando enemigo.
ResponderEliminarIdentificar a la izquierda con el anarquismo y con el socialismo pienso que es un error puesto que ambas ideologías y en especial la anarquista rechaza cualquier formulación política que conlleve a formas de autoritarismo político. La izquierda y la derecha como dicotomía política surgieron a raíz de a revolución burguesa de 1789 con el objetivo de dividir a la población y fomentar el confusionismo social, así nos va. La socialdemocracia sí que la identificaría con la izquierda ya que precisamente es una derivación, escisióm,sucedáneo, como quiera llamársele del socialismo, por el hecho de incorporar la palabra "democracia" ya denota su inclusión en el juego político del parlamentarismo y su identificación con la izquierda política, de hecho ellos mismos utilizan el término izquierda para definirse. El humanitarismo de estos hipócritas consiste en atacar a quien les molesta y a quien poseen riquezas naturales que puedan ser usurpadas, tachándolos de esto y lo otro para tener la excusa perfecta, de lo que haga falta, de fascista, de dictador, etc...
ResponderEliminarAfirmar que el anarquismo no puede ser de izquierdas puesto que los anarquistas rechazan el autoritarismo (habría que ver cuál es su forma específica de autoritarismo) entraña una premisa: que la izquierda es necesariamente autoritaria y que donde no hay autoritarismo no puede hablarse de "izquierda". Pero este supuesto hay que demostrarlo, y es imposible de demostrar porque "izquierda" no es un concepto ideológico, sino puramente político, como ya he explicado en el post anterior. Además, habría que preguntarles a los propios anarquistas y socialistas: la inmensa mayoría de ellos se considerarían de izquierdas y el uso general de las palabras, que tiene mucha importancia a la hora de determinar su significado, como no podría ser menos, coloca al socialismo y al anarquismo en el campo la izquierda contemporánea. Esta es, al menos, una opinión que razonablemente muchas personas podrían compartir sobre el empleo de los vocablos "derecha" e "izquierda".
ResponderEliminarUn anarquista puramente dicho rechaza cualquier forma de estado o gobierno impuesto aunque sea por las urnas(autoritarismo) ya que lo que propugna el anarquismo es el propio autogobierno y la propia autogestión por parte de los trabajadores, lo cual conduciría a eliminar cualquier privilegio de clase. Esto obviamente es una utopía pero es la explicación más elocuente de lo que es en sí el anarquismo. La ideología socialista la han acoplado a la izquierda con el objetivo y es lo que yo pienso de eliminar cualquier tentativa revolucionaria por parte de esta ideología, de llevarlo a la práctica por parte de los trabajadores,domesticándola políticamente,¿Desde cuándo el socialismo históricamente se ha autoproclamado de izquierdas?, precisamente la izquierda es el otro brazo político del capitalismo. Hay que partir de la base que cuando se crearon los términos izquierda y derecha, en la izquierda estaban representados los burgueses, o sea,los dueños de las fábricas que explotaban salvajemente a los trabajadores, por lo tanto asociar la izquierda a ideologías que propugnan un control y un justo reparto de la riqueza por parte de las clases proletarias no tiene sentido. Obviamente quien asocia el término izquierda a estas ideologías revolucionarias en lo social está equivocado, este es el problema, la manipulación mediática de los términos que se enquistan como auténticos dogmas. Ocurre igual cuando se asocia el fascismo(en sus más diversas variantes) a la derecha, pues lo mismo, manipulación, desprestigio y distorsión de los términos, todo encaminado a confundir y a dividir a la sociedad.
ResponderEliminarComo siempre Jaume, un saludo.
ResponderEliminarEn lo particular, tal vez no adepto al cristianismo institucional, sin embargo la enseñanza de Cristo como pauta de vida la sigo defendiendo, no veo en Cristo sino a un revolucionario, a un caudillo de lo no-judío que luego fué desprestigiado con la creación de una religón e instituciones de dogma en la que -no veo por qué - se integraron textos judíos que no tienen nada que ver con Cristo en us parte práctica.
Yo soy cristiano solo de 4 evangelios, de una vida de acción y de repudio a lo judío que lo criminalizó y condenó, ese mismo virus judío que hoy día también enferma y criminaliza a las sociedades mundiales. Incluso me parece que Cristo o Jesús para verlo más como un hombre (¿Qué más da si era hijo de Dios o solo un hombre?) fué simmpre más agudo y severo contra lo judío que incluso contra el imperio romano a decir de los evangelios.
Me repugna ver como ahora en EUA nación de derroches, desmanes y fanáticos, los cristianso evangélicos no son más que un rebaño de enajenados ardorosos más projudío que cristianos.
Remato diciendo: Paz en la Tierra a los hombres de buena voluntad, queda claro si se lee entre lineas lo que hay que hacer con quienes no lo son.
Los términos izquierda y derecha no tienen contenido ideológico, como ya he dicho, ni institucional, son meros puntos de referencia, de sentido relativo en función de la época, el lugar y la posición social de los agentes. Las verdaderas ideologías (socialismo, anarquismo, comunismo, fascismo, socialdemocracia, liberalismo, etc) no se pronuncian sobre un dato que forma parte del plano estratégico-táctico de la acción política, pero carece de significado doctrinal específico (su significado no es desdeñable, pero pertenecería más bien al orden de la filosofía de la historia).
ResponderEliminarUsted habla como si "izquierda" y "derecha" fueran ideologías o como si esos dos términos hubieran funcionado siempre y en todos los lugares como funcionan actualmente en España PP y PSOE. Pero le recuerdo que ha habido una izquierda revolucionaria, por ejemplo, totalmente rupturista, y una extrema derecha legitimista, también rupturista respecto de los partidos parlamentarios del sistema burgués.
El transfondo de todo el asunto es histórico-temporal: se llama derechista a lo que se ubica, en diferentes puntos de referencia, en la dirección o proximidad creciente de contigüidad a etapas históricas y sociales anteriores a la Revolución Francesa; mientras que se denomina izquierdista a lo que avanza hacia el futuro en la línea del progreso, aceptando aquella revolución como evento incontestable o evidencia de un cambio social radical e irreversible "a mejor" (y exigiendo, en todo caso, un cambio todavía mayor en ese mismo sentido). Las derechas-izquierdas de sistemas estabilizados de partidos de alternancia (que es de donde usted parece sacar su versión de lo que significan derecha e izquierda) son imágenes detenidas, congeladas, de esa gradación móvil basada en realidad en una concepción de la historia de origen cristiano (la línea progresista, ascendente, que se mueve desde la caída a la redención y el reino de dios).
En respuesta a E20109060:
ResponderEliminarCristo era judío, sus padres lo eran, sus apóstoles lo eran y la idea misma de Mesías, que el creía representar cumpliendo una a una todas las profecías previstas, es también judía. Creo que la mejor respuesta a tu post es el propio artículo "La destrucción de Israel": luchas contra el judaísmo en el terreno de juego del propio judaísmo. Nietzsche ya explicó lo que esto significaba, y sus consecuencias. La extrema derecha judía siempre gana porque sus adversarios han aceptado ese terreno de juego donde todas las pelotas, árbitros, líneas de demarcación, etc., están trucadas. El cristianismo es quizá la forma por excelencia de ese fraude y el artículo intenta arrojar luz sobre el asunto. La destrucción de Israel es un hecho espiritual: hemos de vencerlo dentro de nosotros para poder destruir el tanque Merkava. Saludos.
Saludos a todos y gracias por vuestros comentarios.
ResponderEliminarDisculpen, añado esto, Juan 8:44, un versículo que ni remotamente escucharemos algún día en la iglesia pero que deja claro el parecer de Jesús:
ResponderEliminar8:44 Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.
Pero desde el punto de vista político, los términos izquierda y derecha son insustituibles, pues la mayoría de los votantes en una democracia no son agentes ideólogos ni filósofos y discriminan a las formaciones políticas en función de esa orientación general de progreso y defensa de los más desfavorecidos, donde la derecha siempre representa o bien el poder establecido, o bien el pasado más retrógrado. En política no se puede utilizar la filosofía en estado bruto, hay que plegarse a los usos del lenguaje que la misma gente ha aceptado para orientarse, y expresarse mediante ese lenguaje. De ahí que, quienes políticamente hablando, se proclaman "ni de derechas, ni de izquierdas", en realidad acostumbren a ser políticos derechistas, pues en la dictomía derechas/izquierdas la "derecha" es el término marcado axiológicamente con valor negativo por la misma estructura progresista del tiempo y la historia inherente a la modernidad.
ResponderEliminarLa derecha extrema siempre ha negado que lo sea. Su cuestionamiento del mismo SÍ es, en este caso, doctrinal, por razones obvias: el esquema moderno la condena a la derrota.
Se puede ser "ni de derechas ni de izquierdas" en filosofía, pero en política quien elude posicionarse estratégicamente en ese eje o lo ataca frontalmente como cosa de interés ideológico salta de forma automática al extremo derecho del continuum. No se trata de algo que uno pueda elegir, sino del terreno mismo de juego político desde el punto de vista estratégico y táctico. Asumir la palabra "izquierda" en el sentido que tiene para la inmensa mayoría de los trabajadores, no implica por tanto adscripción ideológica alguna excepto lo que la gente entiende por tal: la defensa de los intereses del pueblo, nada más. Pero cuando todo el discurso ideológico consiste en el repudio de esa palabra, cuyo sentido no pasa en realidad de ahí pese a su profundo calado filosófico (!no ideológico político) entonces es que la derecha, la eterna derecha, anda cerca. Y si no es así, si es que se han confundido los planos filosófico-ideológico y estratégico-táctico, lamentablemente la mayoría lo interpreta así y las consecuencias son políticamente nefastas para el político o la organización que caigan en la trampa del llamado "ninismo" (ni... ni..., etc).
Este es el anzuelo en el que han picado millones de personas para difundir los valores judíos pensando que se oponían al judaísmo: en realidad cumplían una doble función, universalizar los valores judíos mientras, al mismo tiempo, mantenían la cohesión (por presión antisemita) del pueblo judío. Hay una cita de Nietzsche en la entrada que explica todo esto muy bien.
ResponderEliminarPara frel:
ResponderEliminarYo también pesaba como usted, frel, en mi juventud. De hecho tengo escritos que se titulan "el socialismo contra la izquierda". Y desde el punto de vista filosófico, la temporalidad inscripta en el eje derechas izquierdas no es otra cosa que la temporalidad mesiánica judía. Esto se puede cuestionar, y de hecho se cuestiona, en el plano filosófico, incluso en el ideológico algo se puede decir al respecto y lo hemos dicho.
Pero en la política práctica, de partidos, electoral, etc., las reglas del juego están ya dadas, no las puedes poner tú libremente desde una reflexión filosófica.
Por suerte o por desgracia, conozco los dos extremos, la filosofía de alto nivel y la política de calle, donde llegue a ocupar el cargo de secretario general de la Plataforma per Catalunya.
Hay que mantener separados, en la mente, ambos planos de pensamiento.
La política real es como es y no se puede pedir una cancha de juego a tu gusto. Hay un campo y un árbitro y unas normas. O las aceptas o las rechazas, pero si las rechazas quedas fuera de juego.
Si te declaras ni de derechas ni de izquierdas el sistema te penaliza con una ubicación en la extrema derecha, que es como empezar el partido con 10 goles en contra antes de que el árbitro pite el inicio.
Si tengo que escoger entre situarme a la izquierda y ser ARRINCONADO en la extrema derecha (y, repito, no hay elección "ninista" posible, las reglas del juego excluyen salir sin camiseta al campo),entonces prefiero situarme a la izquierda. Máxime si se van a tocar temas políticos como el de la inmigración. Para que me arrinconen en el corralito ultra me queda todo el tiempo del mundo, es lo más fácil que hay en política. Basta con que uno diga alguna cosa verdadera para que le califiquen de fascista.
Pero se trata de empezar el partido con posibilidades de ganar. Y puesto que defendemos los intereses morales y materiales de la inmensa mayoría del pueblo, NO MIENTO CUANDO DIGO QUE LOS NR NOS SITUAMOS A LA IZQUIERDA.
Pero el cuestionamiento filosófico de la temporalidad mesiánica (fundamento ontológico del eje derechas/izquierdas) va por dentro, no lo dude. Mas no se trata de una cuestión que uno pueda sacar a colación en campaña electoral. Le acusarían -ya he sido acuasado de ello- de convertir un acto político en una conferencia para "pedantescos" filósofos que "nadie entiende" y "no sirve para nada".
¿Qué opináis del discurso del Papa? ¿No es una confesión descarada de la dependencia ideológica, moral y teológica del cristianismo respecto del judaísmo?
ResponderEliminarLos conceptos Izquierda y derecha han ido cambindo de significado a lo largo de la historia, pero siempre se le ha supuesto un punto en común : la derecha ha significado la conitnuidad del antiguo régimen (conservadorismo, tradicionalismo), mientras la izquierda ha representado la rotura del régimen actual, y el cambio de sistema.
ResponderEliminarLo que antes era izquierda (burguesia) ahora es la derecha. Pero realmente hoy, con la caida del socialismo/comunismo, ya no queda ningua alternativa real al régimen, y la dicotomia izquierda//derecha carece de significado, máxime cuando los partidos que representan supuestamente estos dos polos, son a efectos prácticos los mismos, a nivel de programario.
Así pues, no encontramos con que hoy uno no puede compartir valores que son considerados "derecha" y al mismo tiempo de "izquierda", por ejemplo ser a la vez tradicionalista, patriótico, anti-immigracionsita, y defender una economia menos liberal.
La posición "centrista" es también un engaño, porque forman parte del mismo continuum, izquierda-derecha, no son ninguna rotura de los esquemas bicéfalos.
Lo que hoy representa los valores o ideas "izquierdistas" es algo más que la defensa de los trabajadores, sino también ese aura de superioridad moral, humanitaria, de los llamados valores "progressistas" (que habria que definir), como son por ejemplo la defensa de ciertas minorias (immigrantes, homosexuales, etc), el feminismo (cierto tipo de feminismo), tambien se caracteriza por su anti-cristianismo (que no ateismo, pues no parecen estar muy encontra del islamismo).
ResponderEliminarEn general, una mezcolanza de muchas cosas, alguns provinentes de la burguesia (el feminismo llama a las mujeres a trabajar, esto es burguesia liberal pura y dura, o la immigración massiva) muchas de ellas claramente contradictorias entre ellas.
En conclusión, el discurso izquierdista, analizándolo de manera racional y lógica, no se sostiene por ningún lado, las contradicciones son demasiadas, es una ideologia complemtamente fallida y podrida. La derecha, por supuesto, no se libra de ello.
Hay que romper las cadenas y empezar de nuevo. Pero como dice Farrerons, nosotros no podemos re-definir las reglas del juego, así que, a los que somos librepensadores, sin ninguna atadura a ninguna ideologia, ni ningun dogma, los que buscamos la verdad, nos van a colocar en la extrema-derecha (Fascismo).
Tenemos dos opciones: Que eso nos de completamente igual, ir por delante con la verdad: O bajar la cabeza y elegir el lado "bueno y socialmente aceptable" que es hoy dia la Izquierda.
Va a tener que pasar mucho tiempo para que esto cambie.
Para la inmensa mayoría de la población, la palabra izquierda sólo significa: defensa de los intereses morales y materiales de los trabajadores. Cierto que los POLÍTICOS de "izquierda", que son en realidad layacos de la oligarquía económica (=derecha católica, masónica, filosionista o judeocristiana), han introducido en el concepto cosas tales como el aborto, la homosexualidad y otros elementos. Pero lo han hecho para compensar la inanidad de sus programas sociales y su total entrega al capitalismo. O sea, lo han hecho porque son derecha masónica pero han de acotar un espacio electoral frente a la derecha católica.
ResponderEliminarLos trabajadores no ven qué tiene que ver ser de izquierdas con la sodomía. Y el motivo es que no hay ninguna relación entre la idea de justicia social y, por ejemplo, el hecho de que una mujer pueda abortar a capricho y otras prácticas que los POLÍTICOS de izquierdas (=derechistas laicos) han introducido en los programas electorales como sucedáneo del socialismo económico revolucionario.
Mi experiencia política me ha enseñado que en el terreno de la realidad electoral la filosofía no puede entrar directamente (una tribuna política no es una cátedra universitaria), sino sólo puede hacerlo de manera indirecta. Si queremos derrotar políticamente a los partidos oligárquicos de izquierda, tendremos que "quitarles" su electorado de izquierdas, su electorado compuesto por 15 millones de trabajadores. Y no lo haremos explicándoles que izquierda y derecha son lo mismo, porque no nos van a entender, podemos decirles que todos los políticos del sistema son lo mismo,que los políticos de izquierdas en realidad son putos derechistas disfrazados, pero no que no existe ninguna diferencia entre favorecer a los trabajadores (izquierda) y favorecer al capital (derecha).
!!!NO SON FILÓSOFOS, PERO TAMPOCO TONTOS!!!
Y si me preguntan, antes de encasillarme en la ultra, que es lo que me pasará si recurro al sonsonete del ninismo, ME DECLARARÉ, SIN DUDARLO NI UN MOMENTO, DE IZQUIERDAS, PORQUE ME SIENTO DE IZQUIERDAS. Ojo, de la izquierda de los trabajadores nacionales, no de la falsa izquierda burguesa, de la oligarquía (que es, en realidad, derecha disfrazada). Yo lo tengo muy claro. Y sigo pensando que el odio a la palabra izquierda proviene del catolicismo, es decir, de la misma derecha que ya he descrito en este post y que critica el internacionalismo izquierdista pero no el universalismo eclesiástico del katholon, que siente asco hacia la homosexualidad pero no dice nada sobre la pederastia de los curas (que en un buen porcentaje son, además, homosexuales), etc.
A mi el sermón de la montaña me produce vómitos, como el olor de la sacristía. Y ambos son "derecha", el alma de la derecha durante siglos...
En fin, mi proyecto, la consumación del proceso de racionalización occidental, la destrucción de la herencia judeocristiana, la defensa del cientificismo, del socialismo, de la isonomía, de la justicia social, todo esto es para mí izquierda y sólo izquierda, pues pasa por una revolución en defensa de los intereses de los trabajadores, del pueblo, de la mayoría de la nación, con la que me identifico totalmente.
Queda por añadir que mi izquierda no es una izquierda a secas, sino una izquierda nacional,pero, en cualquier caso,una auténtica izquierda que debe ser capàz de captar al electorado de izquierdas (=trabajadores) o perecer sabiendo que con ella perece la nación, porque el pueblo es la nación y la nación no es más que el pueblo consciente de sí en la historia.
"Si nuestros políticos son colaboracionistas activos de la invasión es porque existe una tradición cultural anti-identitaria profundamente arraigada en Europa y que va mucho más allá del mero mundialismo liberal."
ResponderEliminarlo dije antes y lo repito ahora, éste blog es de lo mejor que se ha escrito.
ahora bien, volviendo al tema:
el hommus politicus promedio cristiano no se preocupa de la caída de la civilización, de su valor ancestral, sino sólo en la medida en que afecte o no a su dogma.
al entender de los católicos de derecha, lo siguiente es algo meramente moderno:
www.catholicsforisrael.com/he/articles/israel-and-the-church/207-salvation-is-from-the-jews
léase el artículo para llegar al sentido contrario.
como dato adicional al investigador la "infiltración masónica y judaica" también fue "denunciada" en el cono sur por el emblemático leonardo Castellani, el señor rivanera carlés, y el monseñor josé maría caro. el hecho de que no analicen nada previo a la revolución burguesa del 89 hace que no merezcan acotaciones.
ahora bien,
que se pueda combatir el mundialismo desde el catolicismo es una locura argumentativa. "Yo soy cristiano solo de 4 evangelios" reza un lector. con todo respeto a su autor, ése es un punto importante, que señala la asimilación tradición europea = tradición católica, que para bien de la 1ra debe finiquitar ya. existieron numerosas tradiciones (de fe) cristianas, de modo de que puede ser un sujeto cristiano y tradicional a condición de que su elección de fe no suplante a la 1ra. hasta el hartazgo hemos visto cómo el raigambre del cristianismo no es ético. en éste sentido leamos a taciano.
para fundamentar la tradición paulina taciano debe eliminar al 1er enemigo de la recién gestada apologética: al griego.
http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:hHZF64VgniwJ:es.scribd.com/doc/46123466/TACIANO-DISCURSO-CONTRA-LOS-GRIEGOS&hl=es&client=firefox-a&hs=tDE&gl=ar&strip=1
[taciano. discurso contra los griegos.]
.Los griegos reclaman, sin razón, la invención de las artes
.¿Qué han producido, que merezca respeto, con su filosofía?
.No puedo aprobar a Heráclito cuando dice: "Yo me enseñaba a mí mismo", por ser autodidacta y arrogante.
(contradice el la concepción judeo-cristiana al ideal apolíneo-dionisíaco identificado en "La visión dionisíaca del mundo" Nietszche)
luego vendrán otros inquisidores de la fe, convenientemente entronizados santos, como irineo de lyon, que destruirán al enemigo sobreviniente: el gnosticismo.
http://www.multimedios.org/docs/d001092/
[irineo de lyon. contra los herejes.]
.No hay una separación radical entre Dios y el mundo, ni éste es extraño a Dios, ni pertenece a otro Demiurgo.
.El hombre es demasiado pequeño para comprender todos los planes y la vida íntima del Creador; por eso debe con humildad acoger la Palabra de éste, cuando y en la medida en la que él quiere revelarlo
.Jamás probaron haber realizado la resurrección de un muerto, la curación de un lisiado, etc. Los pretendidos milagros son preparados con trucos [los movimientos cristianos se rechazan constantemente entre sí, como embaucadores que recurrían a trucos de magia para presentar milagros]
pensamiento griego -> sincretismo gnóstico -> gnosticismo dualista -> exterminio de éstos -> tradición católica -> contrarreformas reaccionarias -> pensamiento cristiano secular... es a groso modo la línea histórica que demarca el cristianismo hasta hoy. no veo que la línea de salida éste en volver al elogio del sambenito y de la tradición del capirote.
Farrerons, interesante y frontal su crítica nietzscheana contra el origen real del veneno que carcome la modernidad... y que no es moderno como alegan los "tradicionalistas".
ResponderEliminarCon Evola podemos coincidir (ya que en la escala está muy por encima de sus contemporáneos tradicionales) que la primera revolución no fue la francesa -burguesa liberal, sino que ya la cosa venía de lejos con el cristianismo (güelfo contra gibelinos). Y con otros pensadores tradicionales que rescatan incluso la lucha en la edad antigua de las formas semitas contra las helénicas del cristianismo. O sea, el sincretismo cristiano (que el cristianismo JAMÁS fue judaísmo bajo otra máscara, sino sincretismo), es mezcla de espíritu judaico con el racionalismo heleno del Logos. Que tal sincretismo tuvo una tremenda lucha interna de la que salió finalmente vencedora la forma "esoterológica mesiánica fideista" (judaica) y que el resultado secularizado de tal triunfo es un retraerse de lo cristiano actual -que HOY YA no es más "sincretismo"- al judaísmo original (y la extinción de todas las huellas de racionalismo y espiritualismo greco-romano-germanos de su seno).
La distinción "izquierda-derecha" igualmente sigue siendo coyuntural: cabe recordarle que no sólo importa la EPOCA en que se use (hoy), sino el TOPOS. No es lo mismo España donde derecha=catolicismo liberal franquista (en mayor o menor grado). Que el término "ni derecha ni izquierda" por ejemplo en Argentina donde SÍ existió un movimiento de "tercera posición": el PERONISMO, tras el cual escudarse y con el cual hacer entender al Pueblo tal idea (dicho sea de paso, el Pueblo fue peronista por mucho tiempo, así que no es una lucha de "conceptos intelectuales" aquí sino de un rescate de experiencias vitales perimidas por el Liberalismo, la Dictadura y los progresismos). Y por ejemplo en Italia, existe el concepto de "derecha social" que es todo un guiño hacia el fascismo izquierdista de la República "social" de Saló.
Dicho esto, la discusión entre ibéricos es sin sentido. Cualquiera sabe que en lo práctico definirse allí de derechas es ser parte del enemigo (cosa que no sea da en Italia), y que definirse "ni de derecha ni de izquierda" es cosa de mundillos nazis perseguidos (cosa que no se da acá en Argentina). Ya por un carácter político estratégico entonces hay que hacer del rescate del "socialismo prusiano" (el socialismo nacional) a lo Spengler el punto un partido que debe llamarse y posicionarse a la izquierda para no terminar siendo sólo el títere de la derecha. Eso sin contar que "ni derecha, ni izquierda" es también = a "centro". Y que "centro" en el nomenclador político es = a liberales (acá en argentina, también en Alemania, los liberales puros se han autodefinido como "partidos del centro").
Farrerons, tiene algún mail donde mandarle alguna nota de filosofía política de mi autoría?
escudarse no sería propio pues las viejas "Veinte Verdades Peronistas" las esgrime bien el partido institucional FPV. gana, y gana bien. tanto que las unidades básicas las manejan los más aberrantes lacayos de la usura burguesa. de modo que todo el aparato 'nacional y popular' fase actual de peronismo está cerrado salvo en época de elecciones, donde se manifiesta el chantaje progresista (http://laolmos.blogspot.com.ar/2012/03/no-hay-proyecto-nacional-por-fernando.html).
ResponderEliminares menester comprender que ya perón pacta con la derecha (revista la maga, nº3, por miguel bonasso "historia general de los montoneros") volviendo para arreglar con la oligarquía. el general videla también lo afirmará en su autobiografía, que debería publicarse en algunos años.
"cosa que no se da acá en Argentina" dice el autor. conociendo ex militantes de la juventud comunista puedo decirle que bien saben que la frase "ni de izquierdas ni de derechas" es una frase derechista de toda la vida y que la idea de un "socialismo nacional" está desarrollada ya desde el trostskysmo-maoísmo (sic) y la puede encontrar en www.izquierdanacional.org.
hay que verlo bien. en argentina la "solución" no pasa por un partido. a esgrimir programas a los que nadie les va a dar bola. menos si están inscriptos en un todo (el peronismo, que es una cáscara, un vacío) que lo comprende. pasa por eliminar los mecanismos demagógicos y chauvinistas del estatismo. pero mas importante aún, pasa por entender por qué NADIE lo tomaría enserio. porque es preciso un cambio total de mentalidad, de mentalidad del militante. eso de pensar en terminos electorales es una idea burguesa, en la que se "combate" a cambio de algo (materialmente asible, como unos votos). pero "sin teoría revolucionaria no hay práctica revolucionaria" y estamos ante una argentina de 40 millones de individuos donde militan (en todo el espectro político) unas mil personas -descontando punteros- como mucho. por ésto mismo, el pueblo es borrego xq primero es materialista (vertiente judeocristiana o secular) y piensa primero en lo que va a ganar, sino a la calle no sale.
por eso insisto, revísese la historia de la Acción Antifascista. de proyectos como el del diputado zamora. como cayeron. hasta el zurdaje infantil ya no es lo que era. ahora los pibes sólo se juntan por el escabio un 24 de marzo, entre otras fechas, porque el gobierno les pone bandas reagge para divertirse, en un día que (si fueran inteligentes) debería ser de luto. y los "de izquierda" ¡no se dan cuenta! es porque son burgueses que crecieron con página 12 en la mano, del imberbe verbitsky, hijo de clarín.
en argentina "la solucion" no va de entrada por la via parlamentaria. es una cuestión de prelación. va 1ro por cambiar al hombre. "si quieres que cambie el hombre, debes primero cambiar todo alrrededor" (nuesto alrrededor, nietzsche). así, teniendo claro la axiología, sigue la entrega militante: éso es lo fundamental.
Algún día tiene que levantarse un ejército de la justicia y la verdad.
ResponderEliminarPara Francisco M.: comparto totalmente su contribución y veo que ha entendido la necesidad imperiosa de situarse a la izquierda para escapar del corralito ultra en que el sistema mete con calzador a todos los patriotas, incluidos los que no somos ultras ni por el forro.
ResponderEliminarLe dejo mi e-mail:
adecaf@adecaf.com
!!!Un saludo cordial!!!
lo que seguía al enlace de las obras era el contenido suscinto de las mismas:
ResponderEliminar".Los griegos reclaman, sin razón, la invención de las artes" etc
el "desprecio hacia la filosofía de la época trágica de los griegos" no era mío (todo lo contrario), sino del 'emérito' cristiano.
espero no haberme expresado mal. saludos.
No, usted se ha expresado perfectamente, mi confusión se debe a que todavía, como dije, no había entrado en los enlaces (sino hecho una lectura rápida antes de contestar) y la frase no tenía comillas, así que, aunque ya me ha extrañado, he confundido su discurso de usted con el que era objeto de la crítica, precisamente.
ResponderEliminarSaludos.
Para Francisco M:
ResponderEliminarLas doctrinas de tercera posición o interclasistas (alianza nacional burguesía/proletariado) eran posibles cuando todavía existía una burguesía patriótica sincera de cuyo seno podíam brotar sectores dispuestos a defender la dignidad de los compatriotas de clase obrera. Pero después de la Segunda Guerra Mundial las burguesías dejan de ser nacionales y se convierten en enclaves de la oligarquía. El hecho es especialmente significativo, y modélico, en Alemania. También en Argentina, como lo ha explicado Ceresole de forma incomparable. Extinta la burguesía nacional,lo que tenemos es una bipolaridad oligarquía (transnacional), por un lado, y pueblo (nacional) por otro. Ya no hay otra posibilidad que una posición de izquierdas, antiburguesa. Las burguesías son enclaves cipayos del dispositivo mundial de dominación. Estamos más cerca del proletariado y del pueblo de cualquier país sometido a opresión que de la oligarquía autóctona que mantiene sujeta la nación al NOM.
Para Francisco M.:
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con lo que usted dice en (cito textualmente):
"Dicho esto, la discusión entre ibéricos es sin sentido. Cualquiera sabe que en lo práctico definirse allí de derechas es ser parte del enemigo (cosa que no sea da en Italia), y que definirse "ni de derecha ni de izquierda" es cosa de mundillos nazis perseguidos (cosa que no se da acá en Argentina). Ya por un carácter político estratégico entonces hay que hacer del rescate del "socialismo prusiano" (el socialismo nacional) a lo Spengler el punto un partido que debe llamarse y posicionarse a la izquierda para no terminar siendo sólo el títere de la derecha. Eso sin contar que "ni derecha, ni izquierda" es también = a "centro". Y que "centro" en el nomenclador político es = a liberales (acá en argentina, también en Alemania, los liberales puros se han autodefinido como "partidos del centro")."
Para fernando marques:
ResponderEliminarHe añadido este enlace:
http://www.catholicsforisrael.com/he/articles/israel-and-the-church/207-salvation-is-from-the-jews
A la lista de documentación adicional de la entrada. Gracias por su aportación.
He incorporado también a la bibliografía del post el discurso contra los griegos:
ResponderEliminarhttp://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:hHZF64VgniwJ:es.scribd.com/doc/46123466/TACIANO-DISCURSO-CONTRA-LOS-GRIEGOS&hl=es&client=firefox-a&hs=tDE&gl=ar&strip=1
Una prueba más de que la identidad europea nos conduce al tema de la verdad, no al catolicismo. Otra vez gracias por esta aportación.
He añadido asimismo, después de revisarlo,el enlace sobre el gnosticismo:
ResponderEliminarhttp://www.multimedios.org/docs/d001092/
En rigor, el Judaísmo actual es el remanente muy minoritario del existente en la época pre cristiana. Pero pocos saben que ni siquiera una ínfima minoría de quienes hoy se reconocen judíos son individuos cuyos orígenes se remontarían a los tiempos bíblicos.
ResponderEliminarLos esquenazis provienen de la conversión masiva de tribus nómades turcomanas en el Siglo VII en épocas del “Cohen” (Khan) Bulán. Este astuto político y guerrero fundó el Imperio Khazar, a orillas del mar Caspio. La diseminación del esquenazismo en Polonia y Rusia deriva de la emigración forzada de los Khazares en épocas de la fundación de los “Zaratos” de Varsovia y Moscú, en el Siglo XI. Esto fue consecuencia de las victorias de Oleg y Sviatoslav, en la batalla de Kiev y, especialmente del Zar Vladimir. "" \o ""
El historiador español (judeo-árabe) Ibn Saprut relata los hechos de las invasiones contra los khazares en su correspondencia con el Khan Josué. En esas cartas se pide ayuda al Califato para protegerse de los “bárbaros” del Norte y del Este que degollaban a las poblaciones cristianas masivamente —sin distinción de sexo, género o edad— en sus monstruosas arremetidas expansivas.
Además, —por las descripciones de los geógrafos árabes medievales se sabe que el Imperio Khazar— tenía dos clases de población: una pelirroja y de ojos azules (integraban la nobleza y la oficialidad) y otra de rasgos más oscuros y toscos (gente común).
Para evitar debates estériles: estos datos están expuestos con toda claridad en mucha bibliografía, entre la que destaco “History of the Khazar Empire” del eminente judaísta húngaro-británico Arthur Koestler (1905–83). "" \o ""
ResponderEliminarLos judíos no semitas
En efecto, en la baja Edad Media, en la antigua Khazaria, el reino entero se convirtió al judaísmo por decreto real del Khan Bulán, el soberano turco-mongol de las estepas. Así lo relató Arthur Koestler, un judío nacido en 1905 en Budapest, quien estudió el fenómeno de los Khazars, un imperio que floreció de los Siglos VII al XI de nuestra Era. Ese reino, cuya capital estaba asentada en Atil, tenía un poder político extraordinario: se extendía desde el Mar Negro hacia el Mar Caspio, y sus fronteras laterales se erigían desde el valle del Cáucaso hasta el Volga. El rey Bulán, pues, deseoso de abandonar su paganismo para convertirse a una religión monoteísta, convocó a su presencia a un obispo, un imán y un rabino. “¿Cuál de vuestras tres religiones, la cristiana, la musulmana o la judía, está en el origen de las otras dos?”, les preguntó. Al oír las respuestas, Bulán se convenció de que el cristianismo y el islam provenían del judaísmo y decidió volverse judío, adoptando el título de “Cohen”. Ésta es la explicación que Hasdai Bar Shaprut, ministro judío del Califa de Córdoba, recibió a mediados del siglo X de un descendiente de Bulán, el rey José. Al enterarse de la existencia de un reino judío en el Cáucaso, Bar Shaprut había enviado al kahan de los khazares una carta en la que le decía: “Si ese reino existiera, yo dejaría honores y fortuna para ir a inclinarme ante el único rey netamente judío de este mundo”. La respuesta del rey José, redactada en forma legendaria, no resulta menos útil para entender los motivos políticos de la elección de Bulán. ¿Por qué razón esas tribus que acababan de hacerse sedentarias se convirtieron al judaísmo? Es que el territorio Khazar estaba entre dos fuegos: por el norte, los rus, vikingos rusificados que comenzaban a cristianizarse; por el sur, los musulmanes y Bizancio. El rey Bulán debe de haber pensado que para ascender socialmente necesitaba abrazar una religión prestigiosa, “civilizada”, no los dioses de a caballo de su pueblo guerrero. Pero, a la vez, al elegir el judaísmo se aseguraba cierta independencia: una especie de “tercera posición” con aspiraciones de predominancia y dominio sobre sus vecinos.
Los Khazares estaban ubicados “entre dos potencias mundiales principales: El Imperio Romano del este en Bizancio y los seguidores triunfantes de Muhammad”. Desde que el mundo fue entonces polarizado entre estas dos superpotencias, la Cristiandad, que representaba el modo de vida Occidental, y el Islam. El imperio Khazar representaba una tercera tendencia que sólo podría mantener su independencia política e ideológica negándose a aceptar a la Cristiandad y tampoco al Islam. No teniendo el deseo de ser dominado por cualquier de lo dos imperios, el rey Khazar —como se dijo— “abrazó la fe judía” en el Año De Cristo 740, ordenando a sus súbditos, obviamente paganos hasta el momento, hacer lo propio. Así evitaba subordinarse automáticamente tanto a la autoridad del Emperador Romano Bizantino como al Califa de Bagdad, manteniendo su independencia absoluta. De esa manera el judaísmo pasó a ser la religión estatal oficial de los Khazars.
Obviamente los motivos del rey en adoptar el judaísmo fueron meramente políticos y no religiosos. “Por tal razón, la gran masa de judaísmo moderno no es de origen semita sino caucasiano”, según la teoría de Koestler.
ResponderEliminar“Sus antepasados no migraron desde el valle del Jordán hacia el Volga, ni de Canaán al Cáucaso”, expresa el investigador. “La idea prevaleciente sobre las de migraciones judías que fluyeron por el mediterráneo a través de Francia y Alemania hacia el Este, para luego “retornar a Israel sería indefectiblemente errónea”.
Esta investigación fue denominada y publicada por Koestler “La Décimo tercera tribu” (“The Thirteenth Tribe”), y allí el autor refuta la noción de una “raza” judía propiamente dicha, asegurando con rigor científico que la mayoría de judíos del mundo contemporáneo no proviene de Palestina y no le reconoce —incluso— ningún origen semítico.
De hecho, su investigación demuestra que la mayoría de judíos se originaron en que hoy es el territorio eslavo, donde un gran número de campesinos y guerreros de la zona, tanto eslavos como magiares, se fusionaron con los turcomanos y mongoles —a raíz de los raptos y las violaciones— y adoptaron los ritos hebreos a través de la conversión compulsiva —bajo las órdenes del soberano— a quien le convenía la abjuración de los Cristianos lugareños, bajo los axiomas cismático-segregacionistas talmúdicos.
El imperio de los Khazares conquistó —con el tiempo— a los búlgaros, a los burtas, a la tribu de los ghuzz, a los magiares (actualmente los húngaros), a las colonias góticas y griegas de la Crimea, y las tribus eslavas en el bosque del noroeste. "" \o ""
Según la enciclopedia judía, en el Siglo XVI cerca de un millón de Khazares dominaba la región —según cita Koestler— documentando que con el tiempo “la mayoría de los que profesaban la fe judaica o eran Khazares o provenían de sus conquistas”.
Como Koestler señala, los judíos cayeron en dos divisiones principales que subsisten hasta nuestros días: los “sefaradíes” y los “azkenazitas” (Sephardim y Ashkena-Zim).
Los Sephardim son los descendientes de los judíos que habían convivido en España hasta su expulsión, junto con los musulmanes, al final del siglo XV, y que más tarde se reacomodaron en los países de las orillas del Mediterráneo, hablando un dialecto en español antiguo, conocido como “ladino”.
Para tener una idea exacta, hacia1960, los Sephardim eran cerca de medio millón de personas, mientras que, hacia el mismo período, los Ashkenazim rondaban los 11 millones. Así, “en lengua vulgar, el judío es casi sinónimo con Ashkenazi”, según el autor.
ResponderEliminarSin embargo —Koestler agrega— el término Ashkenazim es engañoso porque generalmente era aplicado sólo en Alemania, contribuyendo a la leyenda que el judaísmo moderno se habría originado en el Rin.
No hay, sin embargo, ningún otro término que se aplique a la minoría sefaradí del judaísmo contemporáneo, la cual surgió detrás de la conversión masiva al judaísmo del imperio Khazar.
Pero volviendo a la decisión del Cohen, tan astuta como riesgosa, que aislaba a los khazares en medio de dos mundos —cristianismo e islamismo— tuvo un éxito perdurable. El imperio khazar llegó a ser poderoso. Itil era un mercado abigarrado por el que transitaban comerciantes de Europa y de Asia. La hija de un kahan (Cohen, como se dijo) llegó a casarse con el emperador de Bizancio, Constantino V. Convertidos a un judaísmo extraño, con Biblia pero sin Talmud, los khazares sirvieron de tapón entre el norte y el sur. Hasta que la condición de intermediarios, que era su fuerza, provocó su pérdida. En 965, el príncipe ruso Sviátoslav -un gigantón de pelo rojo, con su aro de perlas y rubíes en una oreja, alimentado con carne cruda y hongos alucinógenos, que recorría la estepa seguido por su horda salvaje- destruyó la ciudad de casas redondas que imitaban las tiendas del tiempo en que los jázaros todavía eran nómades. Su acción no quedó sin castigo: cuando volvía de incendiar la hermosa Itil, jamás reconstruida, otra horda salvaje, la de los pechenegos, lo mató y festejó la victoria bebiendo en su cráneo.
Después de la destrucción de su Capital y el Imperio (entre los Siglos XII y XIII, los judíos khazares comenzaron a perder batallas ante los Caballeros Cristianos, y debieron emigrar de su reducto, donde eran odiados ancestralmente por su crueldad para con sus numerosos enemigos, desplazándose hacia Europa Oriental, principalmente hacia Rusia, Ucrania y Polonia, en donde los sorprendió el amanecer de la Edad Moderna, cuando las concentraciones máximas de judíos de esa procedencia fueron localizadas, viviendo auto-marginadas de la población “goy” por exigencias ancestrales del compendio de sus libros sagrados, entre ellos el Zohar («el libro del esplendor»), la inextricable Cábala («la magia recibida» [del cual provienen los principios masónicos] y el inhumano Talmud (que —a su vez— significa «instrucciones»), compuestos de la «Mishná» (código de leyes iniciáticas), y la «Guemará» (la interpretación de esas leyes por los “sabios” del “pueblo elegido”).
El desplazamiento judío se movió entre una dirección consistentemente occidental, desde el Cáucaso hasta Ucrania, pasando por Polonia, y asentándose residualmente en Europa Central”.
Si bien existen judíos de origen diferente, que confluyeron en una identidad hebraica mundial, “la masa de ese pueblo se originó del país de Khazar” en el sector que hoy es parte del Norte de Gruznia, y el extremo Sur de lo que luego fue la antigua Rusia, en la ex Unión Soviética.
Está “absolutamente documentado“, según Koestler, que, por ejemplo el elemento numérica y socialmente dominante en la población judía de Hungría durante la Edad Media fue de origen Khazar.
Un estudioso israelí contemporáneo, Abraham N. Poliak, un profesor de Historia Judía Medioeval de la Universidad de Tel Aviv citado por Koestler, declara que “…de los descendientes de judíos Khazar, hay un escaso número de personas que permanecieron en Khazaria, pero la gran mayoría emigraron hacia Europa Occidental, los Estados Unidos y otros países. Son quienes —para Israel— constituyen ahora la gran masa del judaísmo mundial”. Para más detalles, léase “El Fantasma de los Jázaros”, de Alicia Dujovne Ortiz, que salió publicado en LA NACIÓN, el sábado 14 de agosto de 1999.
ResponderEliminarDesde que millones de cristianos —sobre todo de los Estados Unidos de América— están convencidos de la veracidad del concepto que Dios dejó en heredad el territor de Israel, para la “tribu” bíblica de judíos del Oriente Medio, las investigaciones del Dr. Koestler se han tornado irónicas.
La mayoría de judíos hoy jamás fueron genéticamente ni nativos ni herederos de la “Tierra Santa” ni de cualquier otro territorio del actual mundo árabe. Por eso los israelíes no demuestran ningún apuro por desenterrar a un ancestro tan problemático. Sin embargo, la curiosidad científica ha logrado superar las barreras nacionales y, también, cierta molestia perfectamente comprensible frente al rastreo de “la raza”. El Museo del Ermitage de San Petersburgo acaba de reconstruir fragmentos de utensilios hallados en sitios khazares, donde se menciona varias veces la palabra Israel en caracteres hebreos. Más aún, se ha resuelto someter los huesos encontrados en esos sitios a pruebas genéticas. Estudios de ADN que evocan demasiado las prácticas de la preguerra alemana como para resultar simpáticos, pero que —pese a todo— revelarán el misterio del verdadero antepasado fantasma del presuntuoso y agresivo “pueblo elegido”.
Koestler, que originalmente publicó “La Decimotercera Tribu” en 1976, notó que, indagando en la genealogía del imperio Khazar se comienza a develar —en definitiva— el engaño más cruel que alguna vez se ha perpetrado en la tergiversación de la historia.
ResponderEliminarAunque esta historia haya sido estudiada con anterioridad en la década del '30 —previo a las investigaciones de Poliak y de Koestler— por un historiador francés de origen ruso, Alexandre Baschmakoff, y en la Universidad de Tel Aviv, entre otros, en el fondo ni los israelíes ni los soviéticos demostraron mayor interés por sacarla a la luz. Los rusos hasta sepultaron bajo las aguas de una represa la fortaleza khazar de Sarkel. El científico ruso Mikhail Artomonov, en la década del '60 intentó reflotar el tema en la Universidad de Leningrado, pero fue silenciado pues la voluntad oficial era ocultar la presencia de un imperio importante anterior al poderío ruso de Kiev.
Muchos palestinos, afectados brutalmente por este hoax de nuestros días serían los primeros en estar de acuerdo con estos estudios. A la vista de estos descubrimientos, sería una ingenuidad inferir que lo único que separa la paz de la guerra es un rabino esperando que su Dios lo bendiga por su fe en el retorno del Mesías, a quien no quiso reconocer hace más de dos mil años y mandó a crucificar.
Misteriosamente, el libro de Koestler “se ha esfumado” de la biblioteca más prestigiosa del mundo (la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos), y sólo hay una mención en los registros informáticos: “desaparecida del estante”. El libro está agotado “permanentemente”, aunque puede conseguirse algún ejemplar usado por Internet, porque en realidad existe, aunque —sin duda— muchos intereses desearían que la investigación jamás se hubiese realizado. “
Por fin, la Universidad Hebrea de Jerusalén rompió con la maldición de los khazares. Entre el 24 y el 28 de mayo de 1999, tuvo lugar en el Instituto Ben Zvi un coloquio internacional que reunió a especialistas como Peter Golden, de la Universidad norteamericana de Rutgers, para quien la conversión de los khazares se produjo de manera gradual. También disertó Norman Golb, de la Universidad de Chicago, quien reveló la realidad del proselitismo judío en la baja Edad Media, catequización luego completamente abandonada. Y hasta el Profesor Dr. Constantin Zuckerman, del Collége de France, manifestó que esa conversión no tuvo lugar alrededor de 740, como siempre se pensó, sino en 861, es decir, un siglo antes de la destrucción del imperio por el alucinado Sviátoslav. Como sea, fecha más o fecha menos, los propios judíos no tuvieron más remedio que reconocer —ya en plena era del ADN— que ni su religión ni su raza nada tienen que ver con el legado de Dios.
Un conferencista cesanteado
ResponderEliminarLuego de ellos mismos haberlo invitado a disertar en las últimas semanas, el lobby financiero de los EEUU desató una feroz persecución contra el Dr. Arun Gandhi, nieto del reconocido líder pacifista hindú, por haberse pronunciado contra Israel y reclamarle a los judíos que pongan fin a su constante victimización por el presunto “holocausto”. "" \o ""
Arun Gandhi, de 73 años, era el fundador y presidente del “Instituto Gandhi para la No Violencia”, con sede en la universidad estadounidense de Rochester, y es padre de Tushas Gandhi, quien preside la Fundación Mahatma Gandhi con sede en Bombay, India. Fue quien logró recuperar las cenizas de su bisabuelo para poder verterlas en el río Ganges.
El pasado 7 de enero fue invitado por el diario The Washington Post a que escribiera un ensayo para aportar al tópico “Identidad Judía” que promocionaba el medio. El Dr. Gandhi decidió abordar el tema desde un enfoque diferente, dando su opinión sincera y crítica respecto a la conducta del judaísmo, sin tratar de ser “políticamente correcto”, sino pronunciando su verdadero pensamiento.
De este modo, escribió: “La identidad judía parece haber quedado atada al holocausto. El holocausto fue nefasto, sí, pero los judíos hoy no sólo quieren que los alemanes se sientan culpables sino que todo el mundo lo esté. Este es un muy buen ejemplo acerca de como una comunidad puede llegar a sobreactuar una experiencia histórica, al punto que termina despertando el rechazo y la repulsa de sus propios amigos. El mundo sintió pena, pero cuando un individuo o una nación se rehúsa a perdonar, esa compasión de los demás se trastoca y termina convirtiéndose en odio”.
La Biblia gira alrededor de los pueblos gentiles, judíos y paganos, no es pertenencia particular ni hereditaria de los judíos. Ese antiguo pueblo recibió la revelación, a partir de los Diez Mandamientos, para revelarlos al mundo. Por eso fueron llamados “el pueblo elegido”. En cualquier caso, en modo alguno para «apropiárselos».
ResponderEliminarHoy en día, hay intereses, especialmente norteamericanos, demasiado naïf —o tal vez interesados—que financian el desplazamiento de judíos desde la diáspora a Israel para acelerar el “cumplimiento de la profecía” de la conversión de los judíos al Cristianismo, pero en Israel no cuestionan a esos grupos financieros, omitiendo su disentimiento con la idea final de las congregaciones episcopales.
En realidad buscan la dominación mundial, al igual que los Khazares, pero ya no les interesa que los gentiles se conviertan al judaísmo, y menos aún que los judíos se conviertan al Cristianismo, como es la intención del Sumo Pontífice, según el dogma de la Santa Iglesia. "" \o ""
Las ayudas e indemnizaciones eternas son muy bien vistas y recibidas en Israel, sin cuestionamientos sobre la idea final —cual es la Conversión. No tienen el menor interés en ser Católicos. Su ideología no es ahora la destrucción de los pueblos gentiles, como cuando eran virulentos guerreros expansionistas, sino su sometimiento por otros medios.
La revolución de 1917 fue judeo marxista, y es un hecho histórico, desapareció la nobleza rusa y las Cruces fueron bajadas de las cúpulas y de los altares. Los bolcheviques asesinaron a 100 millones de personas, y más del 30 % de los revolucionarios eran judíos, lo que también es un hecho histórico.
En la Argentina donde vivimos también el 25% de los terroristas de los años ’70 eran descendientes de los Khazares, tanto en ERP como en Montoneros. Miriam Lewin lo era, Marcos Osatinsky, Horacio Verbitzky, Carlos Kunkel y demás… El Poder Judicial está infiltrado por los Rozanski o los Skidelski, campeones de los “derechos humanos” patibularios. La nueva oligarquía financiera de la patria también está repleta de “caucásicos”, a través de los Midlin, los Werthein, el grupo Esquenazi y muchos más. Y esto también es un hecho —lamentablemente— trágico, a la vez que innegable e histórico.
Urgente24 08/02/2008 “The Jews of Khazaria” ""
"...Regresarán Inglaterra, Rusia, China, los protestantes y los judíos".The history of feudal Russia (7th c. to 1917) Hartford Publishing
THE THIRTEEN TRIBEby Arthur Koestler Binding: Paperback Publisher: Random House Date Published: 1976-07-01 ISBN-13: Arun Gandhi, nieto del líder pacifista de India, Mahatma Gandhi, fue forzado a renunciar a su cargo de presidente del centro de paz de Nueva York. Iton Gadol 27/1/08
He colgado estos fragmentos de un artículo sobre la obra de Koestler para poner en evidencia otros aspectos fraudulentos, los raciales, del nacionalismo judío de extrema derecha.
ResponderEliminarLOS JUDÍOS NO SON UNA RAZA. NO SE DESTRUYE ISRAEL MEDIANTE UN GENOCIDIO DE JUDÍOS, SINO QUE SE DESTRUYE ISRAEL DESTRUYENDO LA IDEA. ISRAEL ES SÓLO UNA IDEA Y NADA MÁS QUE UNA IDEA. UNA IDEA LETAL.
ResponderEliminarLA TAREA DE ESTE BLOG ES LOCALIZAR DICHA IDEA, IDENTIFICARLA, PARA PODER ELIMINARLA DEL INTERIOR DE NUESTROS PUEBLOS E, INCLUSO, DE NUESTRAS ALMAS.
ESTE ES EL PRIMER PASO PARA LA LIBERACIÓN POLÍTICA DE LA OPRESIÓN OLIGÁRQUICA A ESCALA MUNDIAL.
Los judios Ashekanzies y Sefarditas son genéticamente a medio camino entre los Levantinos (Palestina, Líbano, Síriac) y los Europeos. Miren estos mapas genéticos su posicionamiento (donde AJ = Ahskenazim Jew), se situan entre Turcos y Chipriotas :
ResponderEliminarhttp://img42.imageshack.us/img42/3456/anthrospain4.png
Donde por cierto los españoles (ES) aparecemos entre Frenceses e Italianos del Norte (Lombardia) que suele ser lo habitual en estos mapas.
No sé cómo este tema derivó en un posteo genético-etnicista. Algo que sirve bien poco para la anulación del ideal semito-cristiano secular que ha calado como virus en la cultura europea.
ResponderEliminarRealmente se hace un muy mal favor desviando la conversación hacia allí. Lo importante primero es la reconstrucción cultural de la cosmovisión clásica ("europea", aunque no ligada a un continente dado). Y tal refundación no se dará, ni por la destrucción material de Israel (mentira que sirve ante a los intereses sionistas y su doctrina paranoide de "obedecerán o seremos destruidos"), ni siquiera por la destrucción "espiritual" de Israel (de la civilización que representa). Sino primeramente a partir del surgimiento en las propias tierras del rescate de esa cultura suprimida por el ideal fideista, por la anulación (a través de su aislamiento cultural, y no de un exterminio de las gentes) del sentimiento movilizador cristiano; por un rescate de lo filosófico, lo artístico, la virtud poética, guerrera, erótica -en un signo contrario a la cristiana medieval, la moderna ateo-masónica secularizada, o la posmoderna judaizada y hedonista.
La charla sobre la división racial judía, como fin en sí mismo, es un elemento más de la cosmovisión hebrea (la puja sefardíes, askenazíes, etíopes, "tribus perdidas") en su búsqueda de legitimación. Y tienen como fin último una legitimación racial de un hecho sobrenatural: saber QUIENES SON MÁS CERCANOS A AQUELLOS HEBREOS "HISTÓRICOS" (BÍBLICOS) QUE "FIRMARON" CON EL DIOS YAVEH UN PACTO.
Por tanto la discusión biologicista sobre "judíos reales" y "conversos posteriores" es sólo propio del medio fideista judaico, para el cual es muy importante saber con quién su "Dios" pactó una alianza sobrenatural (que incluye el pago de "una dominación sobre toda la Tierra" con los pactantes humanos). Ayudar a tal creencia oscurantista de un dios pactador, y seguir las líneas racistas hebreas que declaman que hay algunos judíos "más judíos" y otros menos; aún esto en la forma de que "no les corresponde Israel porque no son los judíos históricos con los que UN DIOS (imaginario) pactó su alianza", es llevar agua para el molino enemigo.
Es más si hoy se demostrara que TODOS los judíos actual son descendientes directos de Moisés (aquel al que su Dios habría entregado su ley) en lo RACIONAL no me cambiaría a mí en lo más mínimo: no agregaría más derechos a ellos para ocupar Palestina, ni para reclamar por su victimismo metafísico frente al mundo, ni para decir que son los reales "herederos" de las promesas pactadas en la Biblia.
La luca es pues de una civilización oscurantista y fideista, milenarista, fetichista, atrasada en sus ejes mentales metafísicos -a pesar de su avance práctico técnico; contra una cultura clásica, corrompida, degenerada, cansada, vencida, anulada, engañada, pero que tiene todavía el numen vital del que puede florecer la visión propia de nuestro pueblo... y si no florece, morir heroicamente en el intento.
Entiendo que se haga toda esa disquisición biologicista para demostrar que incluso los cuentos de la Biblia no tienen ya ni una base "histórica" real detrás -ante la falta de conexión de "la mayoría de los judíos actuales" con los del pasado. Pero el ataque racional cientifico JAMÁS debe ir contra ese punto nimio! Sino contra el eje vital de todo ese culto fideista. O sea, contra la misma noción del Dios judaico del desierto "dueño del mundo", que "pacta con humanos", regala títulos de "propiedad" sobre la Tierra, realiza trucos, "milagros", "siete plagas", y que está en el reino de la magia y no en el de la Razón. Y que en esta época racional, todavía logró pasar "desapercibido" y no ser barrido por su esencia más propia de eras pre-Logos.
En cuanto a que en Argentina decir "ni derecha ni izquierda" no sirve. Es falso.
ResponderEliminarCitar que los "militantes comunistas" entienden el sentido de la frase como propia de un "fascista" no importa en lo más mínimo. Porque en la Argentina es tal la REALIDAD de tal sentencia, que el Pueblo (el hombre de la calle, la mayoría silenciosa, incluso la clase media), puede estar más cómodo e identificarse más con esa sentencia que con el militante comunista.
Cosa que en Europa no pasa, donde la izquierda es la dominante cultural sobre el terreno. Aquí ser "rojo, zurdo, comunista" es propio de una MÍNIMA MINORÍA (que no sobrepasa el 5%), y tomado como un INSULTO. Así que lo que opine tal minoría sobre el resto de la población, a dicha población "le chupa un huevo" lisa y llanamente.
Luego el punto de la tercera posición no es meramente "político", sino filosófica: la posición del eje central europeo enfrentada a la tenaza del liberalismo anglosajón y el marxismo soviético (algo tratado ya por Heidegger, Ortega y Gasset, Evola, entre otros) idea que acá en la Argentina está sustentada sobretodo por el texto filosófico base del peronismo "La comunidad organizada" (el cual está en discusión si fue escrito por un cura cercano a Perón, filósofo, aristotélico y hegeliano de derecha, o por el profesor de filosofía Carlos Astrada, a un tiempo heideggeriano, hegeliano, marxista, y que presentara Perón como suyo en la apertura de un famoso Congreso de Filosofía que hiciera durante su gobierno).
La idea de tercera posición también fundaría la geopolítica de "el tercer mundo" (en parte en base a nacional socialistas exiliados a países del medio oriente que influyeron en sus partidos nacionalistas seculares). Y hasta está detrás de la creencia de que hay un nacionalismo, un socialismo, un populismo "a lo latinoamericano" (o sea, que hay una forma propia, y tercera, de presentar las políticas locales). Y que abren un buen juego a desarrollar sobre ese concepto de la "visión y prácticas propias sobre el XXX (liberalismo local, socialismo local, nacionalismo local)". A diferencia de Europa donde si uno dice, por ejemplo, "queremos una política X pero ESPAÑOLISTA" inmediatamente caerá en el costal de los "fachas".
Acá podemos perfectamente (y todos lo hacen) decir que queremos un NACIONALISMO, SOCIALISMO, MARXISMO "LATINOAMERICANISTA". Y con ese titular luego trastocar el contenido al punto de hacerlo contrario al "verdadero" marxismo, nacionalismo de conceptos importados.
ResponderEliminarIncluso más, son los "progres" de izquierda (socialdemócrata, y comunistas ortodoxos) los que han debido camuflarse... adaptarse a ser "nacionales y populares" para poder ser oídos por las masas y la militancia. Una muestra de que ya tenemos una victoria anotada: no son las "terceras posiciones" (culturales, no las del plano político-económico, ojo, que como dijo Farrerons significan una alianza con los burgueses nacionales, los cuales hacen rato ya se han vendido al gran Capital), las que son vitupereadas por el Pueblo, sino las "progres" y las "liberales puras", y todo gracias a ese manto tan denostado del "peronismo".
No acepto el concepto de que el partido gobernante actual sea la bolsa de gatos, de una casta corrupta que usa al resto. Ni que el peronismo histórico sólo sirviera para hunidrnos, y menos aún la estúpida sentencia de que el peronismo revolucionario (Montoneros, y su concepto de SOCIALISMO NACIONAL, LIBERACIÓN NACIONAL, PATRIA O MUERTE, SACRIFICIO MILITANTE, HOMBRE NUEVO por sobre el individualismo), que fuera el más coherente con una lucha contra el sistema moderno, sea tratado como "terroristas marxistas dirigidos por una minoría de infiltrados judía", y toda la parafernalia de mentiras que decía en esa época la Dictadura (como excusa para destruir el país, desindustrializarnos, matar a los que se resistían a ello, y tornarnos una Nación liberal, individualista y "occidental y cristiana").
Y el 24 de Marzo, entiéndalo bien, don Fernando Marqués no es una jornada para ir a lloriquear por un luto, a "VICTIMIZARSE" (una creencia que es propia sólo de judeo-cristianos renegados de este mundo, "un valle de lágrimas"). Sino para CELEBRAR a nuestros MILITANTES muertos, CAÍDOS EN COMBATE, "con el fusil en la mano" y una idea (que sin importar el resultado, sino el deber de su cumplimiento tal como marcaría una ética kantiana de los fines) tenían en su corazón los que cayeron por ella.
El 24 no fue un festival de hippies, rastas, marihuana y gente que haría mejor en tomarse los días para irse de vacaciones. Es la fecha para demostrar que el intento de arrasar nuestro país ha fracasado, que el enemigo ha usado todos los medios (morales, amorales, inmorales, para ello) y aún así no lo ha logrado, y que a pesar del fuego y el calor, sobrevivimos la erupción en Pompeya.
Europa, a esta altura, puede decir mucho menos. La lava les pasa por encima, y siguen votando los mismos partidos políticos de siempre. Las calles se les incendian y siguen leyendo a los intelectuales que les dicen "el fuego no existe, las calles están en paz". Las estructuras de poder productivo se han despedazado, y todavía apoyan borreguilmente a los mismos sindicatos (que los han vendido), soportan a la misma clase empresaria que los hunde (en la pobreza, en la olla de la inmigración masiva, en el paro, en el endeudamiento). Que cada vez están más cerca de discutir si es "la Biblia o el Corán" el libro de cabecera, pero aún así defienden a rajatabla a sus universidades y academias anquilosadas, sus iglesias, sus medios de comunicación.
ResponderEliminarCon el tremendo desempleo español, con el colapso gigantesco y jamás visto de Grecia, acá en latinoamérica "atrasada" ya nos habríamos mandado un par de revoluciones, caceroleadas, escapes presidenciales en helicóptero. Celebramos entonces que nosotros todavía tenemos algo de espíritu que se inflama para hacer "de las peores cosas" contra el enemigo, porque en otros lares más avanzados del mundo, los "desarrollados" (civilizatoriamente, pero degenerados culturalmente) no pueden ni levantar un concejal "identitario, socialista nacional, revolucionario" ni aún cuando la mitad del pueblo está en su peor quiebra de la historia. Si hundido el barco todavía aplauden y discuten a ver qué oficial a cargo es el "mejor capitán" de su Titanic, cómo no celebrar que aquí hay un día para recordar a los muertos que cayeron luchando contra los capitanejos puestos por el Capital extranjero para hacernos pedazos como país contra el témpano de la modernidad ... y que todavía seguimos a flote.
La diferencia es tal que en Argentina la izquierda se ha hecho (por motivos estratégicos) toda "nacional y popular" (hasta en el partido comunista si va tienen su cuadrito del "general san martín" y algún procer más, porque "eso es lo que le llega al pueblo"). Y en Europa, en especial en España, es al revés: todo movimiento "nacional y popular" (o sea, volkisch) debe estratégicamente enmascararse como de "izquierdas" o nace ya muerto. Porque el Pueblo no entiende ya otro lenguaje, porque la lucha cultural está tan perdida que hay que entrar por ese lado y construir muy a futuro.
En la Argentina hubo (desde el pasado federalista, reolucionario radical yrigoyenista, peronista, nacionalista, hasta el más cercano socialista, montonero) una "entrega militante" como la mentada por Fernando. Y eso es algo que, guste o no, ha sobrevivido y vuelve a crecer desde el post-2001.
En la lucha entre Comunidad-Polis (homo político-metafísico) contra Individuo (homo económico, del oikos, de lo "social", de la "sociedad civil" de la civilización moderna anglosajona, franco, puritana, judaica, agnóstica, plebeya), en Europa es HOY una mala palabra estar con la "comunidad nacional". Acá es un elogio (así como es un insulto la defensa a ultranza del individuo... ser individualista aquí para el Pueblo, es ser una basura egoísta). A eso llegamos no por la "magia de Dios" sino por la entrega de nuestros héroes militantes de los ´70 (del peronismo del ´50, del radicalismo del 1890-1930, del federalismo y el rosismo de 1820-1850). O sea, llegamos a través de una tradición cultural viva, mantenida viva a fuerza de muertes de militantes, cuyo último eslabón es el que nos recuerda el 24 de marzo (así como el 2 de abril, en otro plano).
En Europa la única lucha "violenta" y belicista que se celebra es la de propia derrota (como continente) en la "liberación" a manos de los norteamericanos y su "american way" consumista.
Francisco M dice:
ResponderEliminar"No sé cómo este tema derivó en un posteo genético-etnicista. Algo que sirve bien poco para la anulación del ideal semito-cristiano secular que ha calado como virus en la cultura europea.
Realmente se hace un muy mal favor desviando la conversación hacia allí."
No se ha desviado el tema a la cuestión genética. Al contrario, se trata de "curarse en salud" y de refutar de antemano que la cuestión genética tenga algún sentido tratándose de los judíos, implementando la idea de que la destrucción de Israel tampoco consiste en aplicar la limpieza étnica (error cometido por los nazis.
Dice Francisco M:
ResponderEliminar"Lo importante primero es la reconstrucción cultural de la cosmovisión clásica ("europea", aunque no ligada a un continente dado). Y tal refundación no se dará, ni por la destrucción material de Israel (mentira que sirve ante a los intereses sionistas y su doctrina paranoide de "obedecerán o seremos destruidos"), ni siquiera por la destrucción "espiritual" de Israel (de la civilización que representa)."
Eso es lo que dijimos más arriba y de ahí la necesidad de demostrar que los judíos no son una raza, sino una idea. Es la consecuencia necesaria del post "La destrucción de Israel" y había que aclararlo expresamente sacando a colación el tema del mito de la raza judía, no sea que por destrucción de Israel se interprete un genocidio o cosa por el estilo.
Totalmente de acuerdo en lo que dice Francisco M aquí (reproduzco textualmente):
ResponderEliminar"La lucha es pues de una civilización oscurantista y fideista, milenarista, fetichista, atrasada en sus ejes mentales metafísicos -a pesar de su avance práctico técnico; contra una cultura clásica, corrompida, degenerada, cansada, vencida, anulada, engañada, pero que tiene todavía el numen vital del que puede florecer la visión propia de nuestro pueblo... y si no florece, morir heroicamente en el intento.
Entiendo que se haga toda esa disquisición biologicista para demostrar que incluso los cuentos de la Biblia no tienen ya ni una base "histórica" real detrás -ante la falta de conexión de "la mayoría de los judíos actuales" con los del pasado. Pero el ataque racional cientifico JAMÁS debe ir contra ese punto nimio! Sino contra el eje vital de todo ese culto fideista. O sea, contra la misma noción del Dios judaico del desierto "dueño del mundo", que "pacta con humanos", regala títulos de "propiedad" sobre la Tierra, realiza trucos, "milagros", "siete plagas", y que está en el reino de la magia y no en el de la Razón. Y que en esta época racional, todavía logró pasar "desapercibido" y no ser barrido por su esencia más propia de eras pre-Logos."
No conozco la situación de Argentina como para juzgar, pero tengo muy claro que la idea de tercera posición incluye un capítulo sociológico de colaboración interclasista que actualmente es imposible, pues, como ya he explicado, las burguesías se han mundializado, son sólo franquicias locales de la oligarquía transnacional. En la actualidad, caído el bloque comunista y con el pensamiento único como centro del "imperio", la contradicción principal es la que se da entre oligarquía (desnacionalizada=judía) y pueblo (nacional). La lucha es nacional-revolucionaria en un sentido radical. La tercera posición, el interclasismo, deviene siempre fraude, pues las burguesías nacionales la utilizarán para engañar al pueblo. En España tenemos ya la fórmula UPyD de Rosa Díez, que está funcionando electoralmente pero será la repetición de lo de siempre.
ResponderEliminar"En Europa la única lucha "violenta" y belicista que se celebra es la de propia derrota (como continente) en la "liberación" a manos de los norteamericanos y su "american way" consumista."
ResponderEliminar!Qué razón tiene usted, Fransico M!
Francisco M (reproduzco literalmente):
ResponderEliminar"Y en Europa, en especial en España, es al revés: todo movimiento "nacional y popular" (o sea, volkisch) debe estratégicamente enmascararse como de "izquierdas" o nace ya muerto. Porque el Pueblo no entiende ya otro lenguaje, porque la lucha cultural está tan perdida que hay que entrar por ese lado y construir muy a futuro."
CONSTRUIR MUY A FUTURO, EN EFECTO, DON FRANCISMO M, PORQUE AQUÍ PARA LLEGAR A LAS CAPAS CULTURALES IDENTITARIAS HAY QUE CAVAR MUY HONDO, LA GENTE ESTÁ TAN MANIPULADA QUE LOS MÁS BELIGERANTES SON CATÓLICOS TRADICIONALISTAS INCAPACES DE VER QUE SU CATOLICISMO ES LA MATRIZ DEL UNIVERSALISMO LIBERAL Y EL PRINCIPAL SOPORTE DEL SIONISMO EN LAS OLIGARQUÍAS LOCALES DESNACIONALIZADAS.
Tenemos que trabajar "a futuro" porque en lo inmediato nos las vemos, en el mejor de los casos, con una ultraderecha inmunda, racista, obscurantista, de skins tatuados católicos, eso es todo lo que podemos presentar al enemigo en una batalla, por supuesto perdida de antemano.
Por ello hemos tenido que constituir una Izquierda Nacional de los Trabajadores. ¿Y quién la está saboteando al máximo? Por supuesto: los patriotas católicos. Ellos son nuestros principales enemigos.
Pero, ¿qué podemos esperar si incluso un Norberto Ceresole era católico y confundía la herencia griega con el "racionalismo cartesiano", mientras al mismo tiempo se congratulaba en Heidegger? ¿Había entendido Ceresole algo de Heidegger, lo había siquiera leído?
Saludos.
Esa ultraderecha inmunda es un producto del sistema para desprestigiar cualquier alternativa en lo nacional y social que difiera seriamente de la usurocracia que nos rige. Ese es el problema, el confusionismo que genera el sistema en la población cuando se ha de analizar el patriotismo en cuestión. La inmensa mayoría de la gente se deja llevar por lo que les ofrecen, por lo tanto una imagen social y revolucionaria del patriotismo está lejos de calar en la población, la manipulación está a la orden del día.
ResponderEliminar1. En cuanto a que en Argentina decir "ni derecha ni izquierda" no sirve. Es falso.
ResponderEliminarno. no es falso. claramente el caso que yo daba era anecdótico. pero eso, la frase era así antes, pero el lenguaje cambió en estos últimos 10 años. y el sentido que le daba el bolche se extendió. aparte de que ser facho sea hoy el insulto, obra del 678, canal encuentro, telesur, télam, clarin, la nación y toda la prensa burguesa, obra de despolitización, si decís no soy de izquierda ni derecha entonces no te endiende ni magolla. como breve afiche puede servir. ahora, te queda diseñar el resto del discurso, xq las bases peronistas ya son anacrónicas. y no lo digo para bardear.
2. "No acepto el concepto de que el partido gobernante actual sea la bolsa de gatos, de una casta corrupta que usa al resto."
es que no es un concepto, ni una abstracción. es una realidad tan obvia que para no verla sólo hay que tener una decidida voluntad de no ver. no tengo ganas de ponerme a citar miles de datos. no es mi intención llevar la razón, eso es así. léase peronvencealtiempo o centroculturalalejandroolmos elija el artículo que quiera, de la fuente que quiera. está a la vista.
3. "El 24 no fue un festival de hippies, rastas, marihuana y gente que haría mejor en tomarse los días para irse de vacaciones."
lo suyo es una idealización. eso fue exactamente el 24. no me mienta. ¿a quien cree que habla, a un pendejo? lo de la gente de vacaciones, porsupuesto. pero, con los fuma-porros y demás gentuza ¿cree que me puede mentir descaradamente? yo vi el acto de plaza de mayo. y escuché a pibas y ví en internet sobre otros. una cosa es el deber sr, y otra la realidad.
4. "Sino para CELEBRAR a nuestros MILITANTES muertos, CAÍDOS EN COMBATE, "con el fusil en la mano".
a partir de ahí no me agrada para nada. reivindica la muerte. chau ética. no me trago el relato de la juventud maravillosa. parece que habla bonafini.
5. "Acá podemos perfectamente (y todos lo hacen) decir que queremos un NACIONALISMO, SOCIALISMO, MARXISMO "LATINOAMERICANISTA"."
ResponderEliminarvaya y compruébelo. en capital, gran buenos aires, mendoza, córdoba, donde sea: murales del partido institucional. actos llenos de pibes marginales, traídos en bondi, por la mafia del partido institucional. nadie quiere un latinoamericanismo en argentina fuera del partido institucional y la gangrena trostkysta. por eso funcionó tan bien el menemismo, el pueblo no un quería latinoamericanismo (ni cultural, ni limítrofe, sólo su mano de obra barata), y fue el unico aspecto junto al 1 a 1 que le permitio hacer lo que hizo (desmantelizacion etc). ahora desde el cabezón de duahalde para acá se pone de moda, el latinoamericanismo, ese fetiche chauvinista, se vuelve funcional. para destruir las bases del pueblo, en su vertiente más noble ítalo-hispana.
ya vivimos un latinoamericanismo horrendo. en el norte, salta, jujuy, un indigenismo absurdo, patrocinado por el estado, con sus emilio salas y "grupos de choque". 70.000 afiliados gracias a la mafiosa alicia kirchner. y miles latinoamericanistas de boludeces más. capaz que por eso ("todos lo hacen") estamos como estamos.
6. "No sé cómo este tema derivó en un posteo genético-etnicista."
esto me pone mal. claramente no era un desvío. sucede que en este mundo hay muchísima gente cuya única voluntad es llevar la razón. y como bien decía schopenhauer, llevar la razón y tenerla no es lo mismo. es pura erística, el método de la entronización del ego. por que:
"Es más si hoy se demostrara que TODOS los judíos actual son descendientes directos de Moisés (aquel al que su Dios habría entregado su ley) en lo RACIONAL no me cambiaría a mí en lo más mínimo: no agregaría más derechos a ellos para ocupar Palestina "
será lo mismo para quien escribió tal cosa, pero no así para millones de judíos. de allí la enorme relevancia. hay que pensar un poco en los demás.
7. "Acá es un elogio (así como es un insulto la defensa a ultranza del individuo... ser individualista aquí para el Pueblo, es ser una basura egoísta)."
hay elementos ciertos, y otros interesantes, pero están mezclados con idealismos no muy románticos. ese discurso de entrega militante del que hablo no mira hacia el 70. no mira hacia el fusil de los cobardes que creyeron que el estado no se les iba a animar, y luego clamaron por "reparación histórica" de cientos de miles de pesos. me asquea el ERP, Montoneros, y toda esa calaña. e igual a gran parte del pueblo argentino. su visión militante es vomitiva.
quiero recalcar que aunque mi lenguaje no sea el más diplomático no tengo intenciones de increpar ni a francisco ni a nadie. es que algunos son temas muy espinosos. personalmente lo que mas me molesta e incomoda es el tema del estado y de su partido institucional, que es una mafia, porque sus desvaríos lo soportamos todas las semanas. y una tras otra, va por más.
ResponderEliminarNo es que quiera fomentar divisiones, pero este tema de Argentina me interesa, y aquí parece haber personas bien documentadas e inteligentes, así que me gustaría saber su opinión.
ResponderEliminarEn cierta ocasión (hará cosa de año y medio) tuve un intercambio de ideas con un argentino sobre el potencial revolucionario en América del Sur y más específicamente, en Argentina.
Mi idea -formada desde la distancia- era que en ese subcontinente había un espíritu revolucionario considerable, fuertemente enraízado en la tradición política. Y que las masas eran altamente receptivas al mensaje antisistema y anti-oligárquico
Esta persona me respondió negativamente al respecto. Me dijo que las tendencias revolucionarias en Sudamérica eran bastante escasas; que las palabras "revolución", "movimiento nacional" o "movimiento popular" no eran más que tópicos recurrentes insertados en el lenguaje político, cada vez más vacíos de significado. También me decía que lo que quedaba del Peronismo (sin entrar a valorar lo que fue en su tiempo)era algo más mitológico que presente en la vida política real.
De la ausencia de una posibilidad revolucionaria real en Argentina, me puso como ejemplo las situación del famoso Corralito, con la gente estafada en masa por sus políticos y reducidos a la miseria, con una juventud forzada a emigrar y una población sufriendo la carestía. Pero todo aquello no sirvió a la postre para causar un levantamiento masivo y ni siquiera tuvo como consecuencia la aparición de un movimiento político consolidado que mereciese el calificativo de revolucionario.
También me aseguraba que la miseria no cesaba de aumentar en Argentina actualmente, que las barriadas chabolistas crecían constantemente en las ciudades, pese a la buena situación económica. Pero que no parecía haber ninguna revolución en ciernes, ni excesivas algaradas (no más de las habituales) ni grupos políticos que fuesen capaces de encabezar esa futurible revolución.
Como se puede deducir, mi interlocutor era muy pesimista con respecto a las posibilidades políticas en su país (y en Latinoamérica en general) y no sé en que medida las puedo considerar objetivas.
Veo que aquí hay personas bien informadas sobre la situación en ese país y me gustaría conocer su opinión sobre dicha cuestión.
P.D: no es cierto que en Grecia no no se hayan dado revueltas, las ha habido y muchas, se han incendiado incluso barrios enteros en las ciudades, e incluso se ha agrdido a los políticos en la calle. Otra cuestión es que las revueltas populares sean capaces actualmente de derribar un gobierno, interrogante que se ya se ha planteado en este mismo blog.
Yo no puedo opinar sobre Argentina. Lo poco que sé me viene de lecturas de Alberto Buela y Norberto Ceresole, ambos católicos y que, por lo tanto, caen en el punto de mira de la crítica de este post. Pero lo se desprende de las lecturas de Ceresole es que en Argentina el fenómeno de la oligarquía (hebrea) se da en estado casi puro desde los orígenes del país, que el peronismo fue el primer intento de nacionalismo social, aunque de orden ninista, lo que no podría sino ser envenenado por esa misma oligarquía (al aceptar el interclasismo, me refiero) y que de todas estas experiencias surge la fórmula izquierda nacional, originaria, precisamente, de Argentina. Pero una izquierda nacional, por lo que sé o parece a primera vista, muy cargada de marxismo trostskysta IV Internacional. En fin, tanto en el caso del peronismo como en el de la izquierda nacional trotskysta, se trata de opciones muy alejadas de lo se propone aquí.
ResponderEliminarsu interlocutor, miguel, estaba en lo cierto. los únicos que hablan de revolución en latinoamérica son individuos que podrán 'saber' algo de política pero no la 'conocen' realmente. porque no conocen la calle, no han militado, no han tenido oportunidad de enfrentar la enorme apatía y desidia que domina las masas y a los propios camaradas o compañeros de cada vertiente o movimiento.
ResponderEliminaren Argentina nadie que quiera hacer política puede hacerlo ya fuera del peronismo, por ello todos, incluso los socialistas, marxistas, bolches, liberales, o montoneros (como el francisco que hablaba x acá) que en su época (previa a la 1ra y 2da presidencias de perón) movimientos antipatrióticos que odiaban al pueblo, con sus funebreros 'fusiles en mano' (entregados por la URSS y la CIA) lucharon cruentamente contra perón, allí, en ese nido de vívoras, se unieron los demócratas y los comunistas, los liberales y los milicos pro-ingleses, diciendo: "para batir al nazi-peronismo", pero perón los venció cómodamente amparado en un pueblo que entendía más de conquista, guerra y legado hispánico que todas sus manierismo afrancesado. luego vino la sangrienta 'revolución libertadora', la historia se teje compleja, pero es más de lo mismo.
y ése fue el peronismo, netamente fascista, en una época en que ya era imposible actuar en política estatal como tal. evita q era camarada, esos sucios bolches se apropiarion de su legado. por eso la gran confusión. el pueblo no comprende la tercera posición.
hacérselo entender es una tarea faraónica. porque ud. podría bien tener la propaganda mas certera y argumentativamente verdadera, pero en la práctica no puede competir contra el Estado clasista burgués, que para mas inri, se llama peronista.
hace años, acá escuchabas a gente decir: "tu bisabuelo se dejaba cortar las bolas por perón", y era gente profundamente tradicional y recta. xq perón los había dignificado. era el perón q nutría del tercer estado (su título original iba a ser: 'la tercera posición', es el tercer reich), de arthur von moelher, que recorrió europa comprendiendo el fascismo y ganando a los dignos militares e intelectuales de la nación. nacieron entonces los de mahieu, los castellani, que por desgracia muchos eran católicos (el neopaganismo, las corrientes espirituales ancestrales que incorporaba el fascismo, se desconocían).
pero hoy tenés numerosos canales de televisión del estado, que deforman completamente el latir de la historia: 'peron era antifascista' se llega a escuchar en el canal encuentro, canal doctrinal del Estado.
ya hace 30 años que se le viene hablando boludeces sobre la revolución a la masa, y la verdad es que el argentino promedio solo quiere vivir tranquilo.
por eso están: los binner, los carrió, la inmunda UCeDé.
y la UCeDé... comprenderla es vital para comprender cómo la política parlamentaria es una pantalla del partido institucional. nunca tuvo representación, siempre gobernó con la presencia suficiente.
ResponderEliminarquedaron las 62 organizaciones peronistas, muchos entienden el porqué del peronismo verticalista. son de las pocas barreras ante el avance incontenible de la plutocracia.
ahora bien, no hay situación prerrevolucionaria en argentina y nunca la habrá. no importa que tan mal economicamente esté el pueblo.
las masas empobrecidas están tomadas por el clientilismo. ¡y la clase burguesa es new age!. yo he ido a 'actos patrióticos' en los que en vez de pronunciar lineamientos de acción llamaban a sus pocos elementos a rezar. no es broma.
hoy existe poca movida política en argentina. mst, polo obrero, bulrich, etc. tienen presencia, pero no deja de ser simbólica. lo que tal vez vea ud. en tv o internet, sólo son militantes pequeño-burgueses de izquierda (idiotas útiles, como diría lenin) por cada 10 de ellos hay 3 agrupaciones distintas q los nuclean, o miles de pibes q cobran alguna 'asistencia' estatal a cambio de su presencia, acompañados de sus guachos, xq cada uno tiene a su vez 3 o 6 crías. el joven promedio está en facebook quejandose. capaz contra el kirchnerismo. capaz contra 'la corpo' (la prensa, que es fiel compañera del Estado). sus viejos leen la nación, clarin, perfil o ambito financiero, y también, se están quejando. la chusma corta las calles y hace piquetes, y no busca corriguir nada (xq ellos son indignados).
ahhh, y los hermanos masones se cagan de risa.
ésto no quiere decir que haiga q bajar los brazos. ¡a la mierda con la esperanza!. ni con todas su decadencia la memoria de la sangre murió. y aunque muera mañana, hay que luchar por el honor.
éso es lo que separa las aguas del militante real, al burgués idiota que lee marcuse o página 12.
El honor, en efecto, el honor, y no toda esa bazofia del "amor", la "felicidad", la "esperanza", que es el brebaje con que el sionismo envenena y desarma a los pueblos, volviéndolos blandos, hedonistas, corruptos. El mal está ya en el año cero: el sermón de la montaña, el cristianismo. Quien no lo quiera o pueda ver, es que ya está infectado por el virus. Hay que arrancar el mal de raíz.
ResponderEliminarUy, tantas incongruencias y malentendidos que no sé ni por dónde empezar:
ResponderEliminar1.a)- Perón no conformó el primer movimiento nacionalista en Argentina, ni siquiera el primer pro-hispanismo.
1.b)- el primer radicalismo (descendiente del movimiento rosista, con Alem y luego Irigoyen) ya fue nacionalista e hispanista. Es más, los conservadores del PAN para 1910 ya estaban en buenas migas con España y los "valores tradicionales", dejando atrás parte de su primigenia tendencia anglófila (algo con lo que dan marcha atrás con la guerra mundial, cuando los conservadores se alinean con los aliados e Irigoyen con la entente alemana-austro húngara y se decalara la neutralidad)
2.a)- la "oligarquía hebrea que gobernó Argentina desde sus orígenes" es una mitificación que realmente no tiene pies ni cabeza.
Hubo una tendencia liberal en la oligarquía unitaria local (de extracción católica y cristiana-masónica), con casi nula presencia de judíos.
2.b)- Los pocos judíos que había no conformaron en el siglo XVIII la capa dirigente terrateniente (que más bien estuvo en manos de vascos, "con olor a bosta" como los describió el revisionismo). La llegada masiva de los judíos se dio por medio del Barón de Hirsch -judío askenazi germano que financió la inmigración de la diáspora en nuestras tierras. Sarmiento -masón reconocido si los hay, presidente y "prócer" argentino (un liberal de extrema cultura y chocante lengua), describió tal situación en el diario La Nación (de la oligarquía local, de otro otrora presidente también masón, Mitre): les llamó una raza detestable e inmunda, por todos lados perseguida, y que no debería ser recibida en la Argentina porque a cada lugar que llegaban sólo traían ruina y tumulto.
O sea, dificil decir que la Argentina tuvo una oligarquía hebrea cuando estos no fueron un poder establecido (ni siquiera fueron bien vistos) recién hasta después de los años ´70 ... oh, casualidad! justo cuando se instala el liberalismo local.
Para agregar el peronismo y su tinte antisemita, coincidía con los "gorilas" católicos de Onganía (muchos antisemitas), y con Montoneros y el ERP donde a pesar de la gran cantidad de judíos se atacaba al Estado de Israel, en posturas pro-palestina así como se hacían discriminación "anti-homosexuales" y "anti-judías".
3- No se entiende lo de que "el fusil en la mano" dado por USA y la URSS contra el "Perón de la 1º y 2º presidencia". Realmente usted Márquez mezcla todo.
Perón nació del movimiento fascista de su época (el GOU), fue apoyado por el ala nacionalista del ejército (alineada con el eje), por los sindicatos y por LA IGLESIA CATÓLICA. Que fueron los 3 fundamentos de su gobierno.
Perón cae por romper con la Iglesia, lo que le lleva a pelearse también con el movimiento nacionalista y el ejército.
No habían "cucos" rojos en esa época ni habían Montoneros.
4- Montoneros nace del NACIONALISMO CATÓLICO, PERONIZADO Y MARXISTIZADO. O sea, los jóvenes que venían de los grupos católicos y nacionalistas (Tacuara, los movimientos parroquiales) y que incluso habían pasado su militancia por movimientos NACIONAL-SOCIALISTAS (como la "Alianza Libertadora" brazo "nazi" del peronismo, donde estuvo el famoso Rodolfo Walsh... o con Jaques de Mahieu, exhiliado aquí debido a su pasado nazi, con el que por ejemplo militó el otro famoso Galimberti) reciben la influencia de dos figuras claves: el Che Guevara (junto a Fidel Castro y su revolución armada victoriosa) que proponía alzarse en armas contra el imperialismo para lograr una LIBRACIÓN NACIONAL, y Perón en el exilio (que fue visto por esos grupos como el "líder" que podría dirigir tal liberación de la que ellos se consideraban el "ejército popular" contra el ejército cipayo de los liberales). De allí que Montoneros, un desarrollo de Tacuara, pasa a desde posiciones de derecha tradicionalista católica hacia las de una izquierda nacional tercermundista (un "Socialismo Nacional" como definieron ellos mismos su proyecto).
ResponderEliminarUsted Márquez podrá venir con cuentitos propios de la derecha peronista, pero eso no quita que tal derecha peronista fue cipaya y colaboradora (con el Proceso y el liberalismo peronista) y los movimientos armados de la izquierda peronista fueron los que se jugaron las pelotas y la vida contra el invasor cultural, económico e imperialista (mientras los gordos sindicales realizaban un "pacto sindical-militar" con la Dictadura).
5- El Peronismo fue INTERCLASISTA en su forma "Real" -las presidencias históricas de Perón. Cuando éste intentó desarrollar su doctrina con base católica (no olvidemos que a los curas les había dejado además manejar la educación en la época), de corte burgués y anti-marxista. Entonces Perón propugnaba una BURGUESÍA NACIONAL, un ataque directo a todo sindicato de izquierda no alineado con su verticalidad, la persecución, censura y cárcel a opositores políticos e ideológicos. Y los famosos dichos peronistas acerca del papel del "obrero" en todo esto, papel que no eral el de un forjador Junguereano (o como en el "malvado comunista" de Lukacs): "de casa al trabajo y del trabajo a casa", "alpagartas sí, libros no". El rol del obrero era el que le daba la Iglesia (una oveja del rebaño) y Perón su pastor. Todo siguió bien hasta que Perón cortó relaciones con la curia por disputas de poder.
6- Finalmente cuando Perón se pelea, la Iglesia le hace el golpe (la Armada, liberal y proinglesa ya lo había intentado y fallado varias veces... recién cuando el ejército católico y nacionalista se pliega al movida el golpe es exitoso).
¿Y qué pasó con el "interclasismo" peronista primigenio? Pues se fue al tacho de basura de la historia. La "Burguesía Nacional" que tanto apoyó Perón, formará entonces el peor grupo de lobby liberal (la "patria contratista" de la UIA), las cúpulas sindicales se dedicarán a negociar con los golpistas acerca de un "peronismo sin Perón".
Conclusión, el interclasismo de origen en la "doctrina social de la Iglesia" del peronismo fracasa rotundamente. Sin su base nacionalista, católica, del ejército... y tampoco sin apoyo de la burguesía nacional tan subsidiada por Perón, ni de sus centrales sindicales. Los únicos que lo apoyan aún son los obreros a pie y delegados sindicales de base.
7- Perón entiende bien su error, y cambia su visión. Nombra a J. Cooke jefe del peronismo, siendo el tal Cooke el "marxista" del movimiento peronista de la época (y jefe de la juventud peronista). Siendo el tal Cooke, uno de los pocos que se bate a tiros por Perón en Plaza de Mayo, mientras los "gloriosos sindicalistas" se van a la casa a disfrutar de sus dineros y le dejan vía libre a los golpistas.
ResponderEliminarEntonces Perón apoya el desarollo de la izquierda peronista, "la tendencia": movimiento que se inclina hacia la lucha armada (contra los negociados, como hacía la CGT sindical de Vándor mandado a matar por ello por el mismo Perón), contra el interclasismo (y por tanto a favor de la lucha de clases), contra los burgueses (y por tanto a favor del socialismo como modo de gobierno).
Todo un desarrollo del que es también muy responsable y culpable Perón.
8- En los ´70 ya había un enorme cambio cultural en el Pueblo, y la cosa derivaba hacia formas que podían llevar a la expulsión del pensamiento burgués liberal (que imperaba ya desde el siglo XIX aquí). La respuesta fue otro golpe de Estado y la "limpieza étnica" de los elementos bio-culturales que presentaban peligro para el sistema.
Declaraciones textuales de uno de los ideólogos de la avanzada imperalista sionista-liberal moderna en la Argentina, y jefe de la junta del Proceso. Dice Videla (http://www.lanacion.com.ar/1464650-videla-admitio-que-la-dictadura-mato-a-7-u-8-mil-personas) en un libro de próxima aparición:
a) PROCEDER A LA "DISPOSICIÓN FINAL" (asesinato) DE TODOS AQUELLOS QUE FUERA NECESARIO PARA MANTENER EL SISTEMA EN PIE
b) realizar tal procedimiento realizando un esquema barbárico (en lo ético) planificado (en lo metodológico): SECUESTRO, TORTURA, ASESINATO, DESAPARICIÓN DEL CUERPO Y NEGACIÓN DE TODO LO SUCEDIDO.
Esto con un doble objetivo: causar terror en la población (Hobbes básico, y "cómo dominar"), y borrar toda huella de rebelión y toda posibilidad futura de "idealización" de los combatientes revolucionarios (el ejemplo que da Videla es el de Santucho, que querido por el Pueblo, se iba a formar un sitio de culto en torno a su tumba.... pero cómo? no era que "nadie del Pueblo quería a los zurdos"?)
c) SE QUISO DISCIPLINAR LA SOCIEDAD EN LO SOCIAL (defensa del Orden ante esa REAL REVOLUCIÓN POPULAR EN CIERNES), DESTRUIR EL "POPULISMO" EN LO POLÍTICO (la "deriva peronista" que hizo Perón al dejar atrás su interclasismo y apoyar las tendencias de izquierda nacional anti-capitalista), IMPONER LA ECONOMÍA DE MERCADO LIBERAL (contra el intervencionismo estatal imperante entonces), Y TAMBIÉN DISCIPLINAR AL SINDICALISMO Y AL CAPITALISMO LOCAL ("la patria contrastista", la vieja burguesía nacional y los viejos sindicatos herencia del viejo peronismo histórico).
9- El LIBERALISMO ANGLO-SIONISTA IMPERIALISTA se impuso así a sangre y fuego. Acá no hubo "derechos humanos", Nüremberg ni nada.
Los pocos presos fueron indultados por un gobierno de peronistas de derecha (el menemismo) y tuvieron que pasar 30 años!! para que unos pocos viejos fueran al banquillo de acusados.
A todo esto, la derecha peronista traidora y cipaya. Primero: antes del Proceso planteó con Luder EXTERMINAR a los revolucionarios, luego del Proceso planteó dar AMNISTÍA a los asesinos liberales, y con Menem-Cavallo-Alsogaray darles INDULTOS totales.
ResponderEliminarY hoy lloran porque ven a Videla o Bussi u otro torturador del sistema en un tribunal.
"Gracias" al Proceso y su matanza de militantes de extracción nacional de izquierda, y al pacto del Proceso con los COMUNISTAS y la URSS quedaron vivos del lado "socialista" toda la tropa de lameculos internacionalistas, maximalistas y "progres". Los cuales no fueron ni perseguidos ni torturados ni asesinados. Siendo los que plantearon una mixtura nacionalista, socialista, populista, peronista los que fueron asesinados y desaparecidos.
Resultado: hoy la izquierda local empieza a ser "progre", social-demócrata y trotskista (las variantes de moda en Europa hace rato), en vez de masivamente nacional como lo eran en los ´70
10- El Kirchnerismo actual se erige en ciertos paradigmas nacionales y populares, muy diferentes (y opuestos) a los trostkistas, internacionalistas, y hasta progres (hay una tensión interna actual con el grupo "progre" kirchnerista y los otros).
Es falso que exista un estado "pre-revolucionario", pero es más falso que estemos como una sociedad pasiva y en caída libre.
Si crecen las villas (favelas/chabolas) es debido a la inmigración limítrofe. 2/3 de todo nuevo pobre es extranjero. Por tanto, eso demuestra que el país ES inclusivo a tal punto que los pobres los empezamos a recibir de afuera y no a producir por una falla sistémica del modelo.
La juventud militante creció exponencialmente comparada con la década del ´90, y las medidas "POPULISTAS" están a la vista de TODOS.
Ya lo vé, que somos amigos no de la Reina de Inglaterra, sino de Chávez, Fidel, Dilma/Lula, Evo Morales, Lugo, Mujica y demás "malvados populismos anti-imperialistas". Que nos peleamos por Malvinas en todos los foros, que recuperamos lo robado por empresas extranjeras como Repsol (lo lamento por los capitalistas de España, pero el petróleo argentino es argentino y no de "la Caixa" o el "Santander/BBVA").
Es evidente que "tan oligárquicos hebreos" no somos, no?
Qué alegría me da encontrarme aquí con la argumentación de mi compañero Francisco al volver a releer "La destrucción de Israel" sugerido por un comentario de la entrada "Comprender a Heidegger".
ResponderEliminarSi en Argentina todavía ocurren rebeliones con raíz en el pueblo profundo y todavía conmueve el ejemplo de sus héroes, nuestro problema quizá sea que el peronismo y nuestra izquierda nacional siguen insertos en los ideales felicitarios de raigambre cristiana como bien lo percibe Jaume. No ha habido en Argentina una formulación teórica a nivel político de la opción existencial que nos hermana aquí. No nos engañemos, el pueblo argentino es profundamente cristiano (y lo es más aún con un Papa argentino...)
En eso nuestra tarea filosófica es de tan largo plazo como la que les depara a ustedes en España. Siento que Zaratustra percibió lo mismo cuando el último hombre le dió la espalda al anunciarle la hora del gran desprecio... ¿Cómo podremos pasar por sobre las bases mismas de la nacionalidad, y peor aún, de la cultura popular, si nos aparecen ambas casi indisolublemente unidas a la fe cristiana y a la 'felicidad del hombre'?.
Zaratustra fue más que elocuente en "La ofrenda de la miel". Hagamos nuestras sus palabras: "Yo y mi destino, no hablamos al Hoy, tampoco hablamos al Nunca; para hablar tenemos paciencia, y tiempo, y más que tiempo."
¡Nuestra Untergang es nuestra Übergang! ¡Nuestra más alta esperanza!. ¡Un gran saludo a todos!.