miércoles, septiembre 25, 2013

La Fundación Rockefeller apoyó al Movimiento 15-M para manipular a los indignados






















Hete aquí el apoyo de Martin Varsavsky, que también se tradujo en financiación económica, de uno de los peones de la fundación de David Rockefeller al Movimiento 15-M.

El artículo, publicado por "El Mundo", se titula "La pureza está en la mezcla"(esto de la mezcla racial es, como sabemos, una pauta de conducta harto "progresista" que los israelíes acostumbran a practicar con los palestinos).

Rockefeller, Varsavsky, Hessel, Levi

Pero, ¿quién es Martin Varsavsky? Pues desde Argentina nos lo explican en un artículo reproducido por la página de Daniel Estulin, periodista de Russia Today y autor de varios libros sobre el Club Bilderberg.

Quisiera recordar que un 15 de mayo (en el año 1948) comenzó la Nakba. Por supuesto, también esto es pura casualidad. La etiqueta "indignados" la inventó Stéphane Hessel, personaje sobre el que hemos escrito un libro que pone en evidencia la verdad sobre la manipulación de decenas de miles de personas; ciudadanos machacados por los recortes sociales, el paro, los desahucios y las privatizaciones, que actuaron de buena fe mientras la oligarquía sionista movía los hilos de un escenario puramente teatral.

Los indignados fueron a la sazón objeto de estafa y esto ha quedado ya en evidencia el último 15 de mayo, cuando este movimiento, devenido completamente inocuorecibió el reconocimiento de la entera casta política corrupta española, agradecida por sus servicios como "válvula de escape" de la indignación popular ante los devastadores efectos sociales de la crisis económica.

El siguiente engaño es la fundación del Partido X, dirigido por Simona Levi (el nombre ya sabe a turrón).

El artículo de Varsavsky representa una defensa del mercado liberal capitalista y uno se pregunta qué tiene que ver todo esto con los intereses de los indignados, cuando la crisis ha sido provocada por la mundialización, la religión de los mercados y deriva, técnicamente hablando, de la desregulación de los flujos financieros promovida desde Estados Unidos, patria del neoliberalismo (Escuela de Chicago). 

Varsavsky le echa en cara a Rajoy que no sepa inglés: quizá si el inepto y putrefacto presidente del gobierno español aprende el idioma de la Fundación Rockefeller podrá esquilmar mejor a los trabajadores españoles. Pero, la verdad, Rajoy no necesita clases de idiomas; ejerce de ramera por vocación y confórmase con unos "pocos" sobres de dinero negro contante y sonante, lenguaje universal asequible a todos los hijos de puta de la tierra.

Varsavsky, en cambio, trabaja por "patriotismo". Es un sionista y el Partido X de Simona Levi un representante directo de los intereses oligárquicos, postrero fraude, en forma de chiringuito político progre, que se apresta a barrer con lo poco que quedaba ya de independiente dentro del movimiento indignado. En especial aquellos quienes empezaron un día a sospechar que globalización e inmigración ("la pureza está en la mezcla", Varsavsky dixit) son dos caras de la misma moneda.

Nadie esperaba por ahí una revolución Rockefeller.

Nosotros tampoco.

Jaume Farrerons
25 de septiembre de 2013



















La pureza está en la mezcla
Así me uno a #nolesvotes
19 MAY 2011 15:11


Queridos amigos @edans @julioalonso @gallir @earcos y otros miembros de #nolesvotes, claro que España se merece estar mucho mejor. Hay que protestar, pero protestemos contra lo que realmente hay que cambiar:
- Protestemos por el derecho a trabajar denegado a un quinto de los españoles.
- Protestemos contra un sistema que hoy no ofrece ni vivienda ni trabajo a un tercio de los jóvenes.
- Protestemos contra una clase empresarial de baja creatividad con dificultad para competir, que se aferra a una situación de privilegios y bajísima competencia. Que cree en el ladrillo como una religión.
- Protestemos por la mejora de un sistema educativo que forma gente para el siglo pasado. Una educación dirigida por burócratas sin un verdadero entendimiento de lo que el mercado laboral necesita.
- Protestemos contra la gran parte del público que espera que el gobierno le solucione los problemas y no se moviliza y frecuentemente tiene poca ética al momento de trabajar.
- Prostestemos contra el mileurismo que es el resultado del bajísimo nivel de creación de empresas de este país, de la poca competencia entre empresas por los empleados, de la enorme tajada de la compensación de un mileurista que se lleva el gobierno.
- Protestemos contra un gobierno incapaz de hacer a España ganar el verdadero mundial que es el de la globalización, empezando por un presidente que no habla inglés y es poco respetado aquí y afuera y una oposición igual de incompetente.
- Protestemos contra un sistema de autonomías mal resuelto, que ha resultado en más y más burocratas y ha dado lugar a una duplicidad de gobernantes muy ligado a intereses del pasado o simplemente corruptos. Aclaremos las competencias y bajemos el coste del gobierno que tiene un deficit enorme.
- Protestemos contra un sistema partidista verticalista donde la gente se elige a dedo y que hace que los miembros de un gobierno tengan que aceptar cosas que no comparten, por ser miembros de un partido.
- Protestemos contra un poder desproporcionado del sistema financiero que hace que la vivienda esté inflada y que el español esté atado a su hipoteca y no hay crédito para las actividades generadoras de empleo.
-Protestemos contra una política inmigratoria que se enfoca en inmigrantes no cualificados, muchos de ellos ahora en el paro, en vez de los emigrantes creadores de empleo como los que otros paises son capaces de atraer.
-Protestemos contra una ley de alquileres que resulta en que seamos el país con más viviendas vacías de Europa y hagamos que entren al mercado y bajen los alquileres.
Ahora comparado con todo esto, lo de la ley Sinde y esas cosas son chorradas, quizás síntomas de algo, pero que no se puede comparar con no tener casa, no tener trabajo, tener una educación obsoleta y estar gobernados por incompetentes y/o chorizos. Por mi podemos dejar esa ley de lado y concentrarnos en lo que realmente le afecta la vida al ciudadano.
Así sí me uno a #nolesvotes.
PD: a todos los que me pidieron WiFi gratis en las plazas por twitter les digo que si, que donde sea que haya protestas Fon ofrece foneras gratis para tener internet en las plazas. Por favor contactar a lorena( @ )fon.com para que te de pases para conectarte gratis o foneras.

 
 Domicilio de Martin Varsavsky. Sin comentarios.

8 comentarios:

Augusto dijo...

Contundente. Y también parece que la "mezcla" propugnada por Rockefeller y compañía incluye todo tipo de drogas...:

http://elfrentenegro.blogspot.com.ar/2013/09/rockefeller-y-soros-los-principales.html

Saludos.

Anónimo dijo...

OK. Seguiremos investigando el tema. Saludos.

Anónimo dijo...

Al poco tiempo de las acampadas se pudo comprobar que era un movimiento para neutralizar a las masas y abortar todo intento de verdadera lucha contra la dictadura oligaquica.

Alan Argento dijo...

Creo yo que las revoluciones nunca llevaron a nada bueno. Y esto ya desde la Antigüedad y acentuándose paulatinamente desde los nefastos días de Lutero hasta Octubre Rojo pasando por 1789. Una de las últimas manifestaciones de estupidez humanas fue el sobrevalorado Mayo Francés. Las grandes cosas siempre fueron hechas por pocos hombres, no por una masa de borregos enfermos y adictos al alcohol.

ENSPO dijo...

Creo que las revoluciones tienen, en efecto, un lado negativo que muchas veces ha sido poco valorado por los "progresistas" y revolucionarios. Pero no se puede caer en el extremo contrario. Las revoluciones no siempre son "malas", así a secas, tienen aspectos "positivos".

Y de todas formas, ¿qué otro camino nos queda frente a la oligarquía financiera mundial que una revolución pacífica y democrática?

¿O vamos a quedarnos de brazos cruzados mientras los usureros saquean el planeta y hunden las naciones, las familias, las culturas, el ecosistema...?

Algo habrá que hacer.

¿Propones una alternativa, Alan?

Anónimo dijo...

Depende que tipo de revoluciones, si hablamos de las que han sido dirigidas por la propia oligarquía entonces habría que hablar de revoluciones que no han tenido prácticamente algo de positivo, pero si se hablan de intentos revolucionarios que obedecen a la reacción espontánea de la ciudadanía, entonces estamos hablando de algo no sólo positivo, algo que es necesario.
Precisamente ahora en el momento en el cual nos encontramos para combatir a la oligarquía financiera internacional es necesario un proceso revolucionario, tal como afirma ENSPO.

Anónimo dijo...

http://almododelcaballero.blogspot.com/2013/09/i-pet-goat-ii.html

Alan Argento dijo...

Bueno, ya que estamos, les digo algunas revoluciones positivas: la de Mussolini y la de Franco. Ah, la de Perón también. Pero son hechos muy particulares que no entran, gracias a Dios, dentro de la definición decimonónica de "revolución"...